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Actualizado
- 17/10/2016 02:00
Creado
- 17/10/2016 02:00
Márquez se vio beneficiado de las caídas de sus inmediatos perseguidores en la tabla del mundial
El español Marc Márquez (Repsol Honda RC 213 V) sumó su quinta victoria de la temporada y con ello logró contra pronóstico su tercer título mundial de MotoGP en el circuito de Motegi, escenario del Gran Premio de Japón.
Márquez se vio beneficiado de las caídas de sus inmediatos perseguidores en la tabla del mundial, el italiano Valentino Rossi, primero, y el español Jorge Lorenzo, después, para conseguir matemáticamente el título, el quinto en su trayectoria en el campeonato del mundo de motociclismo.
UNA GRAN VICTORIA
Marc Márquez entró en una selecta lista de motociclistas españoles.
Márquez obtuvo su tercer título mundial de MotoGP y el quinto de su carrera deportiva.
Además, España sumó el cuadragésimo sexto campeonato del mundo en la historia de este deporte.
Al español de Repsol Honda, que fue el más rápido en la salida, le superaron los dos pilotos de Yamaha a final de recta, tanto Jorge Lorenzo como Valentino Rossi, si bien un par de curvas más tarde el de Repsol Honda recuperó la segunda posición y el italiano se las tuvo que ver con el también español Aleix Espargaró (Suzuki GSX-RR), que le adelantó en un par de ocasiones.
Las primeras vueltas resultaron frenéticas, con Jorge Lorenzo delante intentando escaparse mientras que Márquez y Rossi protagonizaron momentos de alta tensión con adelantamientos al límite entre ambos.
A ritmo de vuelta rápida en el tercer giro tanto Marc Márquez como Valentino Rossi se colocaron tras el rebufo de Lorenzo, que rompió el pelotón de MotoGP y seleccionó a sus cinco mejores unidades iniciales, con ellos tres y Aleix Espargaró y Andrea Dovizioso (Ducati Desmosedici GP16) unos metros más atrás.
En la cuarta vuelta el piloto de Repsol Honda tomó la iniciativa y superó a Jorge Lorenzo, que aguantó tras él y se defendió de los ataques de su compañero de equipo Valentino Rossi con maestría mientras los otros dos integrantes del quinteto, Espargaró y Dovizioso, se iban quedando atrás.
El equipo técnico del piloto de Repsol Honda no tardó en marcar en su pizarra que Rossi estaba ‘k.o', pero con Jorge Lorenzo en la segunda posición, Márquez no podía proclamarse matemáticamente campeón del mundo, aunque el de Cervera continuó con un ritmo firme.
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