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- 09/06/2009 02:00
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PANAMÁ. Con el objetivo de que el regionalismo impere en los campeonatos nacionales de béisbol, los presidentes de ligas aprobaron una nueva reglamentación, sin embargo esa misma norma permitirá que los peloteros cotizados sigan jugando en ligas con mayor caudal económico, que le permitirá pagar altos salarios.
Durante la plenaria de la Federación Panameña de Béisbol (Fedebeis), se acordó que a partir de la campaña 2010 todos los jugadores regresen a sus provincias de origen, con excepción de aquellos que ya tienen contratos firmados.
Además aquellos peloteros ya fichados, que completen cuatro años con participación en otra provincia, se convertirán en oriundos de la misma y podrán seguir en esas novenas sin restricción alguna.
Si bien es cierto la medida obliga a los peloteros a que retornen a las ligas de donde son oriundos, el puente para que emigren a otras provincias seguirá abierto.
Y es que al volver a sus provincias cada jugador tendrán derecho a pedir la remuneración económica que él considere y la liga a hacer una oferta de acuerdo a sus posibilidades.
Si ambas partes no se ponen de acuerdo, la disputa irá a un arbitraje a la Fedebeis, la cual determinará si la petición está acorde con el nivel del pelotero en ese momento o si el ofrecimiento de la liga se apega más a la realidad.
En el caso que el pelotero gane el arbitraje, la provincia está obligada a pagar el salario pactado y si no tiene recursos para hacerle frente a ese compromiso, el jugador se convierte en un agente libre y podrá irse a la liga que sí pueda complacer su petición económica.
De salir favorecida la liga en el arbitraje, el jugador estará obligado a jugar para esa provincia y se si se rehúsa a hacerlo se quedará sin jugar en el torneo.
El colonense Earl Agnoly y los capitalinos Gilberto Méndez y Marcos Solís, quienes tienen contratos firmados hasta el 2011, su cuarto año con Los Santos, se convertirán en oriundos para el actual bicampeón nacional.