Ocho días antes de su reapertura la catedral de Notre Dame de París desveló su nuevo “resplandor” al mundo durante una visita del presidente francés, Emmanuel...
- 06/12/2012 01:00
- 06/12/2012 01:00
BARCELONA. Una noche que se antojaba mágica para Lionel Messi acabó en desgracia para el astro argentino, que inició de suplente el partido de Liga de Campeones que Benfica y Barcelona empataron por 0-0 el miércoles y se fue antes de tiempo, en camilla y lesionado.
Messi, que alcanzó el partido con posibilidades de igualar o rebasar el récord de 85 goles en un año calendario del alemán Gerd Mueller, entró al terreno de juego a los 58 minutos en sustitución del joven Rafinha y abandonó la cancha a falta de tres para el final, tras caer lesionado al chocar con el arquero del Benfica, Artur, aparentemente lastimándose la rodilla izquierda.
El partido era intrascendente para el Barsa, que ya tenía sellado su pase a la siguiente fase de la Champions como líder del Grupo G, pero no para el Benfica, que se quedó sin boleto al vencer el Celtic al Spartak de Moscú por 2-1 en Glasgow.
Sí pesaba el aliente del récord para Messi, que acumula 84 dianas en 2012 en el computo de competiciones (72 con el club azulgrana y 12 con la selección argentina) y al que, a esperas de conocer el alcance de su lesión, aún le restan cuatro partidos antes del año entrante para igualar o superar la mítica marca del germano.
Pese a una convocatoria plagada de jóvenes canteranos y con otras ausencias ilustres, el técnico Tito Vilanova había anunciado en la previa que citaba a Messi “porque donde más a gusto se encuentra es compitiendo’’, y la noticia de su suplencia sorprendió en una noche en que todo parecía favorable para que el rosarino entrara nuevamente en la historia futbolística.
Enfrente, una victoria visitante clasificaba al Benfica a la siguiente ronda, pero a los lisboetas les valía también igualar el resultado del Celtic, quien recibía simultáneamente al Spartak.
Al equipo de Jorge Jesús se le abrió el cielo a los 11 minutos, cuando Rodrigo Moreno, flanqueado por Nolito y el brasileño Lima, se plantó frente a José Manuel Pinto con todo a su favor. Pero al ex canterano del Real Madrid se le nublaron las ideas, colocando con el interior de su diestra el balón a un palmo del poste derecho del habitual suplente de Víctor Valdés.
El error no desalentó al conjunto portugués, que presionó la salida de balón azulgrana y siguió atacando con criterio, rozando nuevamente el gol en un cabezazo en plancha de Lima a centro de Nolito.
La segunda ocasión coincidió en el tiempo con el primer gol del Celtic en su estadio.