Economía de Panamá retrocederá -2.0% en 2020 según el Banco Mundial

En enero, antes de la propagación de COVID-19 en América, el Banco Mundial proyectaba que el Producto Interno Bruto de Panamá sería 4.2% este año, el más alto de Centroamérica; sin embargo, con la pandemia el organismo revaluó sus estimaciones y ahora el istmo decrecerá en -2.0%, aún así entre los mejores números de Latinoamérica.

"La economía en los tiempos del COVID-19", el último informe semestral de la Oficina del Economista en Jefe del Banco Mundial para América Latina y el Caribe destaca Centroamérica, el decrecimiento de Panamá solo será superado por Guatemala, con 1.8%.

Tomando en consideración una recta numérica, cuando el número negativo mayor se aleja del cero, crece menos el país. Ante esa premisa, el Banco Mundial colocó al resto de la región en el siguiente orden de afectación: Honduras, decrecerá con -2.3%; Costa Rica, con -3.3% y los que menos crecerán este año serán El Salvador y Nicaragua, con -4.3%, cada uno respectivamente.

El economista panameño, Víctor Cruz, consideró que "hay que tener cuidado con la proyecciones, pues es necesario cumplir una serie de reglas".

"La mayoría de la gente crea tres escenarios: el pesimista, el medio y el optimista. Sin data es muy difícil hacer estimaciones, pues actualmente solo están operando los sectores agropecuario e industrial, pues la mayoría está detenido, y este virus vino para quedarse como ha sucedido con otras crisis sanitarias", apuntó el economista. 

No obstante, el comportamiento de la economía panameña en los últimos dos años ha estado marcada por la desaceleración, resintiéndose aún más con el COVID-19. "Este 2020 tenía previsto dinamizar la economía con la puesta en marcha de algunos proyectos, pero este año el PIB prácticamente se ha detenido", afirmó.

Cruz, quien no descarta la importancia de las protecciones del Banco Mundial o el Fondo Monetario Internacional, es de la opinión que ambos organismos en otros momentos han fallado en sus proyecciones, y hacer estimaciones en estos momentos es muy delicado. 

"En estos momentos no hay información para verificar eso, y aunque otros hablan de depresión, ya estábamos en recesión. Para que una economía pase a depresión, primero tendrían que ocurrir tres cosas: analizar el crecimiento del PIB de 2019, luego ver cuánto se crece este año, para ver si es igual o menor y ver el comportamiento en los próximos dos trimestres, que de ser negativos entonces habría una depresión", dijo.

"Lo cierto es que las autoridades deben ir evaluando cuando levantar la cuarentena, pues todo tiene un equilibrio y cualquier extremo es malo", afirmó el economista.

Con los datos del informe, el Banco Mundial sostiene que el Producto Interno Bruto de Latinoamérica y el Caribe (excluyendo Venezuela) registrará una caiga a -4.6% este año; mientras proyecta que para 2021 se registrará un retorno del crecimiento de 2.6%.

Para el Banco muchos países de América Latina y el Caribe se enfrentan a esta crisis con un espacio fiscal acotado. El mayor nivel de informalidad hace que sea más difícil llegar a todos los hogares y proteger todas las fuentes de empleo. Estos hogares viven al día y carecen de recursos para enfrentar los aislamientos y cuarentenas necesarios para contener la propagación de la epidemia. 

Estos hogares sostiene el Banco Mundial también dependen de remesas en rápido descenso. Para ayudar a los más vulnerables a sobrellevar estas dificultades económicas, los actuales programas de protección y asistencia social deben ampliarse rápidamente, así como también su cobertura.

Para sobrellevar lo anterior, el organismo recomienda a los gobiernos que asuman la mayor parte de las pérdidas. La socialización de estas pérdidas podría demandar una participación accionaria en las instituciones financieras y en los empleadores estratégicos, a través de su recapitalización. Este apoyo será clave en la preservación de puestos de trabajo y en una futura recuperación, señalan en el informe.