Acciones de la Acodeco en la comarca Ngäbe-Buglé

En una intensa gira de trabajo de cuatro días, realizada recientemente, por la Autoridad de Protección al Consumidor y Defensa de la Competencia (Acodeco), en la comarca Ngäbe-Buglé, se verificaron varios locales comerciales para fiscalizar el cumplimiento de las normas de protección al consumidor y capacitar a la población, mediante jornadas educativas.

Se desarrollaron actividades educativas en varios colegios de la comarca, mediante charlas en salones y la Unidad Móvil de Capacitación, que también se desplazó desde una larga distancia para estos propósitos. Los derechos del consumidor y algunos aspectos de la Ley 45 de 2007, fueron los temas sobresalientes de estas capacitaciones. Estas instrucciones colaboran con la formación de los estudiantes, que en su propio ambiente y con la mira en el futuro, podrán hacer mejor uso de sus entradas económicas y así minimizar cualquier nivel de pobreza.

A pesar de la diferencia de las culturas, manejo del comercio y de diversos criterios sobre los principales productos que se venden en diversos locales, en su mayoría, pequeñas tiendas, que tienen el propósito de ofrecer opciones de primera necesidad, y a pesar de la distancia de importantes centros urbanos, como Santiago o Tolé, donde parten rutas hacia otras partes de la geografía Ngäbe-Buglé, tienen precios competitivos y que hacen que en la comarca exista la comparación de los costos.

Es allí, donde el trabajo de la Acodeco desempeña un papel primordial, en la dinámica de la medida del Control de Precios, que estipula precios topes en 18 productos de la canasta básica de alimentos. Y aquí viene una cadena desde el productor, el distribuidor y el consumidor final, que ve en esta acción legal, una forma de llevar víveres y otros insumos a su mesa, sin tener que sentir un “abuso” de los comerciantes en el precio final.

Cabe destacar que, desde agosto del año pasado, cuando se llevaron a la práctica, los entendimientos del Diálogo Nacional, se detectó nueve incumplimientos sobre los precios de los productos regulados. En este traspié de los comerciantes originarios, más allá de una sanción monetaria, la educación fue fundamental para que las normas fiscalizadas por la Acodeco tuvieran sus efectos inmediatos, para beneficiar a la población en general.

La geografía de la comarca Ngäbe-Buglé, se estima en 7000 km² y su población supera el cuarto de millón de habitantes. A pesar de estos números y las distancias recorridas, desde las sedes regionales de la Acodeco de Chiriquí y de Veraguas, se han verificado 114 agentes económicos de dicha circunscripción en menos de un año. Algunos de los pueblos, en que la entidad protectora de los consumidores verificó, se pueden enumerar a: Nobe, Besikó Teribe, Buenos Aires, Chichica, Diko, Hato Chamí, Jirondais, Kankintú, Llano Ñopo, Soloy, Muná Alto Caballero, Peña Blanca Quebrada del Loro Samboa, Muná, y Susama.

En las últimas verificaciones, más de 150 productos vencidos fueron retirados de las tiendas. Entre estos productos, llamó la atención, latas de leche para bebés. Por lo que se hizo un llamado de advertencia a los dependientes, para que eviten vender insumos en mal estado, que puede traer consecuencias a la salud de sus propios congéneres.

De esta manera, la Acodeco cumple con sus funciones fiscalizadora de los agentes económicos, y la de educación al consumidor, con la población Ngäbe-Buglé.