Decenas de famosos alabaron este lunes el estilo de los dandis negros y lucieron conjuntos de sastrería extravagantes en su honor en el preludio de la...
- 15/10/2008 02:00
PANAMÁ. Una vez más, un menor paga las consecuencias del fuego cruzado entre dos jóvenes de pandillas rivales en el sector de El Chorillo.
El pasado lunes, a las 11:00 de la noche se dio un tiroteo, y una bala se incrustó en el cráneo de la pequeña Ángela Rivera, quien tiene cuatro años de edad.
“Angelita” se encontraba sentada en la sala del apartamento ubicado en el edificio “Los Tulipanes”, y mientras tomaba su biberón la bala entró al apartamento y se alojó en la cabeza de la niña.
Su madre Rosa Ávila, se dirigió al Hospital Santo Tomás donde la menor fue recluida mostrando una condición crítica.
Durante seis horas, la infante fue intervenida quirúrgicamente por médicos del Hospital de Niño, y a las 6:00 de la mañana la operación había terminado.
Sin embargo, la pequeña sigue luchando por su vida y está en cuidados intensivos de Neurocirugía.
El doctor Alberto Bissot, director del nosocomio no dio esperanzas mayores a los familiares de Ángela. “Son pocas probabilidades de supervivencia”, dijo.
Hasta horas de la tarde de ayer, la menor seguía en situación crítica.
La familia afectada denunció también que está siendo intimidación por malhechores en el barrio para que no acusen a los responsables del hecho.
Las autoridades policiales reportaron la detención de dos sospechosos. Pero se sigue investigando.