La nueva red de acaparadores

PANAMÁ. ¿Qué pasos hay que seguir o a qué santo hay que rezarle para obtener una libreta de lotería? ¿Qué dice la ley al respecto? ¿Con cuáles criterios el Estado concede este tipo de prerrogativa oficial? Son interrogantes que a diario son escuchadas por cientos de personas que aspiran a lograr ingresos adicionales en su economía familiar, de aquellos con el ánimo de engrosar la fuerza de venta de la Lotería Nacional de Beneficencia, que bordea los 12 mil ‘billeteros’ o simplemente por curiosidad ciudadana.

Según la información contenida en el portal estatal Panamá Tramita, los aspirantes a ‘billeteros’ deben ser panameños de nacimiento o nacionalización; cursar una nota formal al director general de la LNB expresando la solicitud y llenar un formulario. Una vez cumplidos estos pasos, el aspirante deberá ‘esperar’ la aprobación del director general y, luego, una evaluación socio-económica que le harán funcionarios de la institución. ¿A cuántas personas conoce usted que hayan cumplido paso a paso con estas normas y se les haya entregado una libreta de lotería, tal cual lo consagra la norma?

Como parte de una investigación para conocer el fondo de este proceso administrativo, personal de este diario hizo la solicitud formal hace más de tres meses y el silencio administrativo es lo único que se recibió como respuesta. Históricamente, criterios políticos, familiares —y hasta afectivos— priman a la hora de otorgar este beneficio.

La investigación también establece que el mal cíclico de acaparamiento de libretas de lotería en favor de grupos específicos de personas no solo persiste, sino que se anexan nuevos nombres en un círculo no oficial que crea un ‘negocio’ paralelo en este juego de suerte y azar en control del Estado.

José Pablo Ramos no cumple un año al frente de esta institución (recordemos que en una movida política reemplazó a Delia García Ramírez en este cargo a finales del año pasado) y ya hay un grupo emergente y constatable entre los acaparadores.

Al respecto, la oficina de Relaciones Públicas de la Lotería Nacional comunicó que no harían comentarios. Pese a ello, hubo varios contactos telefónicos, de parte de funcionarios de esa dependencia pública, para constatar el avance de estas investigaciones y sobre las consultas realizadas con personas de una u otra forma involucradas en el tema.

En este punto, salta el nombre de la ‘billetera’ Yatsumi Browne, la última ‘reina de los billeteros’ en la pasada fiesta del Carnaval. Ella y algunos de sus familiares más cercanos han sido bendecidos por la administración de Ramos con asignaciones de más de 2 mil dólares en los diferentes sorteos y modalidades conocidas, según la denuncia de un grupo de billeteros ‘independientes’ que hizo llegar a esta redacción copia de los documentos oficiales de cancelación de las libretas recién asignadas a Browne (ver recuadro).

El padre biológico de Yatsumi Browne –Eduardo Browne- y la actual esposa de éste, Yamilka de Browne, forman parte de esta cadena. Lo curioso en este caso es que el papá de Yatsumi es un líder religioso (pastor evangélico) del populoso barrio de El Chorrillo. Eduardo Browne encabeza la Iglesia Valle de Beraca, en la calle 25 (ver fotografía).

‘La Familia Crisis (como se le conoce a este grupo) en esta administración se ha hecho famosa’, dijo uno de los denunciantes que pidió reserva de su identidad por miedo a represalias de tipo administrativo y de orden policial. Por este caso, uno de los billeteros ‘independientes’ que se mantenían en los predios del Palacio de Las Garzas rechazando los operativos de la Autoridad de Libre Competencia y Asuntos del Consumidor, fue ‘amenazado de muerte’. Conozca en la edición de mañana más sobre esta investigación y la falta de transparencia en los procesos de la Lotería Nacional.