Accidente en Howard complica éxodo al interior

PANAMÁ. El accidente de un camión cisterna que transportaba combustible ocurrido en la entrada de la antigua base militar de Howard, este miércoles por la noche, causó caos en la Terminal Nacional de Transporte.

Los usuarios de Panamá oeste, que diariamente utilizan este centro de abordaje, se tropezaban con los miles de viajeros por la Semana Santa.

El tráfico se paralizó en ambas vías: la carretera Interamericana y la que lleva hacia en Puente Centenario.

Las filas para abordar un autobús hacia las provincias era un asunto de resistencia. No valía la modalidad de comprar boletos con antelación. Los más fuerte lograban subir primero a los pocos buses que arribaban a la terminal.

En cada esquina se escuchaba una versión distinta de lo ocurrido. Unos decían que un camión estaba en llamas en medio de la calle, otros que era el tranque ‘normal’ de todos los días y algunos más aseguran que era por los viajeros de Semana Santa.

Ayer amaneció y el cisterna seguía tirado a la orilla de la carretera. Carros bomba habían entrado en escena, pero no lograban la solución que los viajeros pedían a gritos desde la noche anterior.

‘La semana pasara era Cerro Patacón, ahora es ese camión tirado, la otra semana qué será... Cuándo podremos vivir sin tantos sobresaltos. Será que van a pedir a Estados Unidos que los ayude a voltear el carro ese’, se preguntaba con ironía José Atencio.

En la sede del Sistema Nacional de Protección Civil (Sinaproc), a un par de kilómetros del accidente, las autoridades de Seguridad esperaban a los medios de comunicación para detallar cómo se desplegarían las unidades para los operativos correspondientes a los días santos.

Arturo Alvarado, director del Sinaproc, decía que no entendía la razón de la demora en la remoción del equipo. Y si Alvarado no conoce la respuesta, pocos panameños tendrán la suerte de adivinarla.

Sin embargo, lo que sí pidió Alvarado al Cuerpo de Bomberos de Panamá es que investiguen el caso. ‘Se tienen que tomar medidas más enérgicas contra la empresa dueña del articulado’.

Según reportes del Sinaproc, para la media noche del miércoles se había controlado el derrame y solo faltaba que se removiera el pesado camión.

El funcionario dice que quien tenía que quitar la mula de la calle era la empresa propietaria del equipo. ‘Esa empresa no respondió hasta las nueve de la mañana’, asegura Alvarado, nueve horas después de registrado el accidente.

Para la tarde, y con las dos carreteras que llevan a las provincias centrales despejadas, la terminal seguía siendo un punto de gran concentración de viajeros.

Benjamín Solís, director de Operaciones de la Terminal de Transporte de Albrook, detalló que entre las medidas que habían tomado para agilizar la evacuación de los más de 400 mil viajeros que pasaran estos días por este punto, era que los transportistas cobrarían el pasaje dentro del bus y no en las ventanillas que se utilizan regularmente.

Y, aunque usted no lo crea, hasta la Terminal llegaron los buses piratas.