Cementerio a la desidia de autoridades

COLÓN. El estado del cementerio Monte Esperanza, ubicado en el corregimiento de Cristóbal en Colón, preocupa a la ciudadanía pues se quejan de la desidia en el mantenimiento en esta casa de reposo.

La falta de personal y el poco ingreso económico son las principales causales de que este campo santo no esté en óptimas condiciones, por lo que familiares piden a la administración un trato más digno, para quienes aquí reposan.

Bruna James, quien visitaba a su sobrino en el cementerio recomienda a las autoridades locales cortar la hierba con mayor frecuencia, pues su sobrino solo lleva tres años sepultado en el lugar y aunque ella lo visita con frecuencia, ya no daba con el paradero de su sepulcro.

Por su parte Zenobia Charles, está consciente que no es fácil darle mantenimiento a este campo santo, pero considera que después que haya una buena coordinación entre las autoridades y quienes utilizan los servicios, el lugar se puede mantener en buen estado.

Este diario consultó a la administradora del Cementerio Monte Esperanza, Leyda Chambers, quien indicó que se necesita la cooperación de la ciudadanía porque la mayor parte deposita los restos de sus familiares y los dejan en el olvido.

‘Aquí no se cobra anualidad y si a esto se le suman las exoneraciones a la que se acogen los deudos, el mantenimiento del cementerio se complica’, explicó.

Asegura que en la actualidad cuentan con 6 sepultureros, dos secretarias y dos raqueteros que no se dan abasto con el trabajo.

Sólo en el mes de junio se reportaron 60 sepelios, de estos cuarenta fueron exonerados, cuando en muchos de los casos los familiares pueden costear las honras fúnebres, dijo Chambers.

Un sepelio que se desarrolle en la mañana tiene un costo de 200 balboas, si este mismo sepelio se realiza en horas de la tarde tiene un costo de 300 balboas.

El Cementerio Mont Hope, consta de 93 hectáreas de terreno. Fue inaugurado en 1908 y con la reversión del 1979 pasó al Municipio, desde entonces se le denomina Monte Esperanza, es el más grande del distrito de Colón, conforme a lo estimado en la Ley N 7 del martes 13 de marzo del 2012 fue incluido como patrimonio Histórico.