El paro de médicos veterinarios amenaza crisis alimentaria

La Asociación Panameña de Médicos Veterinarios acordó este lunes prorrogar por 24 horas más el paro de brazos caídos con el que exigen al Gobierno el cumplimiento de las escalas salariales pactadas en 2014 y que debían regir en enero pasado.

Los especialistas iniciaron este lunes la paralización, que afecta a dos ministerios y cuatro instituciones encargadas de la supervisión de alimentos y vigilancia de enfermedades zoonóticas.

QUEJAS DE LOS MÉDICOS

De no lograr acuerdos, la advertencia de los médicos veterinarios es paralizar las plantas de sacrificio o mataderos, lo que pondría en peligro la cadena agroalimentaria del país y la economía.

De hecho, las labores administrativas están suspendidas, pero detener el funcionamiento de unos 20 mataderos en el país provocaría problemas en la importación y exportación de alimentos y desabastecimiento en supermercados, carnicerías y centros de distribución.

El veterinario Guillermo Urriola, con 25 años de experiencia, dijo a La Estrella de Panamá que con un desabastecimiento de carne pierde el ganadero, los dueños del matadero y el público consumidor, que no tendrá donde adquirir sus productos.

Urriola, que labora en el matadero Macello, S.A., donde se sacrifican 200 reses diarias, explicó que la labor de los veterinarios es prevenen que esos animales que se van a convertir en carnes ocasionen enfermedades a la población panameña.

‘Detener los mataderos no le conviene a los comerciantes ni a los ganaderos. Es un sector ya bastante golpeado', señaló.

CONSECUENCIAS

La paralización de los mataderos, por ejemplo, afectaría las exportaciones a Costa Rica de Macello, S.A.

También sufriría un fuerte impacto la comercialización de subproductos bovinos y porcinos, como ‘nuggets', hamburguesas y filetes de pollos. El golpe lo sentirán las empresas de producción, procesamiento, comercialización y exportación que tienen un mercado fijo en Centroamérica, precisó.

La comercialización a lo largo del país se trastocaría debido a que el veterinario también inspecciona los vehículos donde se van a transportar las carnes, para evitar la contaminación y que cumpla con el sistema de refrigeración.

Esta huelga involucra, igualmente, al laboratorio de diagnóstico, administrado por el Ministerio de Desarrollo Agropecuario (Mida), donde se envían muestras semanales para verificar las condiciones del hato y del agua utilizada para lavar las canales (animal destinado al consumo que está abierto y sin órganos internos, sin cabeza y sin extremidades). ‘El agua debe estar libre de contaminantes. El agua es un vehículo que puede llegar a contaminar la carne. Son aspectos que hay que cuidar', remarcó.

TRABAJO EN CAMPO

En las plantas de sacrificio, los especialistas realizan una evaluación antemortem para verificar que los animales no contengan parásitos externos ni estén bajos de peso o presenten otras patologías. Cumplido este trámite, el veterinario gira la autorización y se procede al sacrificio del animal.

En ese proceso de sacrificar al animal, sigue la inspección postmortem que consiste en la examinación de toda la carne y las vísceras destinadas al consumo humano.

Según Urriola, ‘es el trabajo más delicado", porque convierte a un veterinario en un patólogo. En esa tarea, las vísceras y la canal deben ser verificadas para que sean aptas para el consumo humano.

"Hay que hacer exámen a los gánglios linfáticos, los hígados, los pulmones... es un trabajo muy delicado, porque estás trabajando con sangre", agregó.

LAS ENTRADAS

Los veterinarios también podrían suspender el trabajo en aeropuertos, puertos y fronteras.

Según el veterinario Gustavo Rodríguez, quien labora en el Aeropuerto Internacional de Tocumen, las inspecciones que realizan para permitir la entrada de animales en las terminales aéreas es importante, debido a que Panamá es un país libre de rabia urbana desde 1973.

La rabia urbana es una zoonosis causada por un virus que infecta a perros y gatos, y se propaga a las personas a través del contacto con la saliva.

Rodríguez explicó que con la luz el perro o el gato enfermo se pone agresivo, cambia su comportamiento y, sin diagnóstico, puede morder hasta a su dueño.

Allí, manifestó, está la importancia de la licencia fitozoosanitaria temporal concedida por el especialista, que requiere posteriormente la cuarentena domiciliaria.

Los veterinarios del Mida autorizan la entrada al país de los animales y luego los del Ministerio de Salud se encargan de la vigilancia de la zoonosis.

Si el animal está enfermo, el Decreto Ejecutivo 1132 de agosto de 1970 autoriza a la autoridad a reembarcarlo a su país de procedencia, utilizando los servicios de la misma aerolínea en que llegó.

En esas terminales, los veterinarios de la Autoridad Panameña de Seguridad de Alimentos revisan que los alimentos cumplan con los requisitos del registro sanitario. De no ser así, en la inspección de vigilancia sanitaria se decomisan y destruyen.

‘Hacemos un trabajo importante que se conoce poco', sentenció.

==========

EN LA SEDE

Minsa se reúne con huelguistas

Eric Ulloa, secretario general del Ministerio de Salud, explicó que ayer en la mañana sostuvieron una reunión con directivos de los médicos veterinarios y una representación del Ministerio de Desarrollo Agropecuario.

El Minsa y el Mida son las dos instituciones que aglutinan la mayor cantidad de especialistas. En el Mida laboran 120 veterinarios, mientras que en el Minsa son 126 (246 en total).

Ulloa evaluó como positivo el acercamiento y alegó que quedaron en reunirse para atender las peticiones de la agrupación.

En el coloquio, los veterinarios plantearon su disconformidad por algunos aumentos otorgados a especialistas del Minsa y la exclusión del resto que labora en otras instituciones.

El secretario general confirmó que tienen los dineros para atender las escalas salariales, pero deben revisar aspectos en el Decreto Ejecutivo 168 de 2014 como reconocimientos económicos entre $250 y $1,000 por la obtención de títulos académicos.

‘Los montos de los títulos académicos fueron un poco altos y esa parte hay que reglamentarla', indicó. En el caso de los veterinarios que están por contrato, comentó que elevarán la solicitud al Ministerio de Economía, debido a que otorgar la permanencia conlleva un proceso.

Ulloa cree que por los buenos términos del acercamiento, los veterinarios deben levantar la medida de fuerza.