‘No hay amor más grande que dar la vida por sus amigos'

Miles de jóvenes nacionales y extranjeros que trabajaron como voluntarios durante el desarrollo de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) de Panamá tuvieron un encuentro con el papa Francisco.

‘Ustedes ahora saben cómo palpita el corazón cuando se vive una misión, no porque alguien se lo contó, sino porque lo vivieron. Tocaron con su vida que no hay amor más grande que dar la vida por los amigos', dijo Francisco al dirigirse a los voluntarios.

‘Ustedes han querido dedicar su tiempo, energía, recursos, a soñar y armar este encuentro', añadió Francisco.

‘Los voluntarios son las manos de la jornada juvenil', dijo Kadir, un jovencito que en dos ocasiones ha sido voluntario. El rol del voluntario es ‘entregarse, darse y ofrecerse sin esperar nada cambio', añadió Kadir.

Mientras que para Juan Carlos Juárez convertirse en voluntarios representó seguir las ordenanzas de Jesús, ‘quien vino para servir al mundo. Así que vine a servir a los peregrinos en Panamá'.

Al dirigirse a los voluntarios, monseñor José Domingo Ulloa dijo que ‘es posible encontrar personas dispuestas a sacrificarse por los demás. Han dado su apoyo para garantizar que este evento fuera una fiesta de todos'.

Los voluntarios dejaron sus familias y sus planes para ofrecer su servicio. Las cifras indican que cerca de 20 mil personas trabajaron como voluntarios, un 80% son panameños.