Se verán frente a frente

PANAMÁ. Llegó la hora. Luego de mucha espera, del monólogo televisivo de Balbina Herrera y muchas negativas a debatir, nos llegó el momento de ver a los candidatos presidenciales hablar sobre temas que están en la boca de todo el mundo. Pero igual, no estarán todos: Guillermo Endara, no asistirá.

Los candidatos presidenciales deberán contestar 30 preguntas que girarán en torno a cinco ejes temáticos: salud, educación, seguridad, transporte y canasta básica.

Se trata del primer debate presidencial. En el ambiente pululan las preguntas que tienen que ver con las inversiones millonarias en el sector salud versus niños que mueren por desnutrición y parásitos.

Medicamentos que nunca hay, atención de tercera a precio de primera en los centros populares.

El sector educación se ha destacado por dar tumbos sin lograr avances significativos, sin mencionar los presupuestos extraatmosféricos que años tras años se asignan. Lo que sobran son los planes, las estrategias y los foros nacionales mientras en las aulas la calidad brilla por su ausencia.

De la seguridad ni hablar, la promesa de más seguridad contrasta visiblemente con lo que viven los ciudadanos en las calles. Ya no hay lugar ni hora segura, no importa cómo ni porqué cualquiera se puede encontrar con una bala mortal. Sobre esto hay mucho que hacer y mucho que implementar.

El transporte público es en este momento uno de los principales problemas ciudadanos, conductores que viven bajo un paradigma: la anarquía total. Proyectos que no prometen acabar con la impunidad vehicular, pero que se venden como la solución perfecta.

Una canasta básica, con algunos poductos no tan básicos y que a duras penas se cubre con el salario mínimo.

Han sido semanas de organización, reuniones con los equipos de los candidatos y los medios involucrados. Hoy a las nueve en punto de la noche, en el salón Horacio Alfaro de la Cámara de Comercio e Industrias, se verán las caras, frente a frente, Balbina Herrera y Ricardo Martinelli.

Las preguntas serán dirigidas, una por una, a cada uno de los candidatos. Los candidatos tendrán dos minutos para contestar cada pregunta y treinta segundos para la repregunta. El otro candidato tendrá un minuto para ripostar y el primero podrá contestar en otros 60 segundos.

Fue este esquema el que criticó Guillermo Endara y la razón que dio para no participar. Consideró muy poco tiempo para exponer sus puntos de vista. Endara dijo que no cree en planes de gobierno, en su lugar mantiene una agenda de trabajo de veinte puntos.

De este encuentro, la población espera respuestas concretas, soluciones reales a sus problemas diarios. Piden un debate de altura en el que destaquen las propuestas en paquete completo, que digan cómo y cuando las concretarán.