• 06/11/2009 01:00

¿En el PRD?, ¡lo que pasó, pasó, Mario!

Es cierto que en ningún momento se hicieron discusiones nacionales con dirigentes y bases del partido, para analizar y concluir sobre el...

Es cierto que en ningún momento se hicieron discusiones nacionales con dirigentes y bases del partido, para analizar y concluir sobre el “aplastante” resultado de las elecciones del 3 de mayo 2009.

Obviamente, los responsables primarios temían un desenlace como el ocurrido el domingo 18 de octubre, donde la ex presidenta y ex candidata presidencial expuso una parte de la verdad, de la fraguada historia que verdaderamente llevó al PRD a la hecatombe electoral.

En virtud de esa carencia, se generan movimientos en las áreas de organización, donde los Delegados Nacionales recogían firmas para revocar el mandato del CEN. En vista de ello con un sentido de maquiavelismo y oportunismo para evitar tal agravio, repentinamente surge la convocatoria al Directorio de 28 de junio en Santiago de Veraguas, la famosa reunión de “ notables ”, que invocan la firma de un acto protocolar de Unidad, y el último Directorio, donde se escoge un CEN provisional y transitorio.

Estas escaramuzas políticas, según mi opinión, echan por tierra lo que fue la aprobación de una “ Hoja de Ruta ”, porque suprime el calendario establecido como tal, y en consecuencia, tendría que regir lo expresado en los estatutos sobre atribuciones del Directorio Nacional, Artículo 23 literal J: Designar provisionalmente, durante los recesos del Congreso Nacional a los integrantes del Comité Ejecutivo Nacional, que hayan dejado de cumplir sus funciones por ausencias absolutas. En tal sentido es claro y contundente que los miembros del CEN recientemente escogidos, deben culminar el periodo correspondiente, 2008-2013.

Ya sabemos la génesis de la derrota, la candidata de la ambición y el egoísmo que era la reelección en cinco años, estimando que con el dominio de diputados 2004-2009 y la supuesta mayoría que se obtendría en la nueva Asamblea no habría ningún problema para lograr tal aprobación. Por ello la pérdida de la Presidencia no importaba a sus gestores.

Evidentemente amigo Mario, no fue una lucha ideológica de izquierda y derecha ni siquiera se trató de acusaciones, percepción de corrupción o ineficiencia administrativa. No, fue el silencio solapado a responder esa campaña de descrédito, “ Entran limpios y salen millonarios ” y otras falsas acusaciones como las que vinculaban a candidatos en asociaciones ilícitas con David Murcia Guzmán, donde la justicia, la objetividad y la imparcialidad de autoridades y medios de comunicación quedan en entredicho y mal parados. Fue además de injerencia foránea, como un hecho sin precedentes en la historia política de Panamá, 40 millones de razones para persuadir y disuadir la voluntad electoral.

La leche derramada no se puede recoger, las acciones y responsabilidades por estas actitudes internas tendrán el cobro de la factura en el momento propicio; No obstante, las aristas y secuelas negativas como la perfidia, deslealtad y malas conductas dejadas en el camino deben ser combatidas y erradicadas de nuestra vida partidaria, como única forma de generar credibilidad e imagen ante la posibilidad de ser alternativa de poder en 2014. Es la tarea fundamental de las nuevas autoridades del CEN.

*Delegado y director nacional.rafaelpitti@gmail.com

Lo Nuevo
comments powered by Disqus