• 01/04/2017 02:02

Nicki y sus huellas

‘Huellas es un libro de referencia obligada para conocer el acontecer político nacional'

Un hombre honrado, profesional comprometido con la patria, un ciudadano responsable es Nicolás Ardito Barletta, un estadista innato .

Huellas son memorias sin complacencias ni concesiones oportunistas; cada página es el testimonio fehaciente de una época turbulenta y convulsionada con personajes grotescos. Los nombres y apellidos de los protagonistas de la dictadura militar de Torrijos, Paredes y Noriega allí están. Nicki desde sus vivencias comenta lo sucedido con puntual realismo.

Nicolás estuvo muy cerca de Omar y siempre asediado por la izquierda que formó parte del círculo cero que defenestró a Juan Antonio Tack y Aquilino Boyd.

Nicki es doctor en Economía de la Universidad de Chicago y uno de los mejores planificadores de América Latina. Al estudiar un postgrado en Administración de la Educación, dirigido por la Unesco, la Organización de Estados Americanos y el Icase de la Universidad de Panamá, analizamos Estrategia para el Desarrollo Nacional , su mayor legado.

El funcionario tuvo una relevante actividad de servicios a la nación durante el período de 1965 al 2000; asimiló experiencias, amplió horizontes y creció con objetivos claros. Su mandato presidencial es un viacrucis, con traiciones y deslealtades, confió, ingenuamente, en los que hacen de la política un negocio y olvidó que ellos solo tienen intereses.

El economista hace un significativo recuento de la gestión de Roberto F. Chiari y los planes de desarrollo impulsados por David Samudio y el equipo de profesionales de la talla de Jorge Riba, Edwin Fábrega, Rodrigo Núñez y Guillermo Chapman. Se aspira a formar un ciudadano capaz de autosostenerse a través de una educación de calidad.

Ardito Barletta el planificador, le da prioridad al desarrollo institucional con libertad y responsabilidad en una sociedad que goce de una justicia independiente, imparcial y profesional. El desarrollo humano depende de entidades sólidas y respetables. Omar Torrijos lo apoyó al punto que consideró que la planificación es la brújula de la ruta.

Nicolás tiene 30 años en 1968. Crea en 1970 el Centro Bancario Internacional y luego el Bladex como el complemento latinoamericano. Los contactos internacionales y los de Washington le permiten respaldar, efectivamente, los Tratados canaleros de 1979. Los beneficios económicos y financieros de esos tratados son obra de Nicolás, el principal negociador en esa área. Él con luces largas promueve los puertos de contenedores nacionales, los más grandes de Sur América.

El trabajo de equipo es esencial para una obra de Gobierno eficaz. Nicolás organiza el más eficiente del devenir republicano; considera que un equipo es más que la suma de los talentos que lo componen, aprecia el relevo generacional.

Huellas incluye la ejecutoria de un panameño fundacional, un hombre semilla y ciudadano institucional.

El asesinato de Hugo Spadafora lo enfrenta con los victimarios y determina su derrocamiento como mandatario. Roberto Díaz Herrera, el mismo bravucón que le exige las renuncias a Aristides Royo y Ricardo De la Espriella, le grita a Nicki ‘tú eres demasiado demócrata para nosotros, te tienes que ir'. Eric Delvalle le sucede y corre la misma suerte de los presidentes de a dedo.

La elección de Ardito Barletta pone en evidencia que él es un novato en la política criolla. El que escruta elige, las actas son alteradas para escoger al candidato oficialista. La ciudadanía nunca votó a favor de Arnulfo Arias ni de Nicolás, voto contra la dictadura militar.

La política no es matemática, la política al estilo de Platón, Aristóteles, Montesquieu, Maquiavelo, Churchill, Gandhi, Martin Luther King, Mandela es emoción, una pasión.

Huellas traza el perfil de Omar Torrijos sin barnices ideológicos ni de intereses políticos. Un hombre que escucha diferentes opiniones para luego decidir, pero Omar se equivocó con los más allegados que solo tenían el afán de enriquecerse bajo su amparo, así deja en la indefensión a sus esposa e hijos.

La obra, con 395 páginas, está ilustrada y organizada en nueve capítulos. Incluye anexos. Huellas es un libro de referencia obligada para conocer el acontecer político nacional.

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