Crisis y éxito

No ha habido Gobierno con tantos problemas económicos y morales como el actual.

Cuando estábamos en la Cervecería Nacional el país sufrió un peligroso y grave deterioro político. Frente a esa situación, muy preocupante, el ingeniero José Barrios dijo: “Toda crisis tiene sus riesgos, pero también oportunidades”. Eso es lo que el presidente Cortizo está haciendo.

Su Gobierno se inició sin un centavo y con cuantiosas deudas. Tuvo que hacer, en sus primeros días de mandato, empréstitos millonarios para pagar la inmensidad de deudas que dejó pendiente el Gobierno anterior y también poder comenzar a funcionar.

La situación económica del país es muy crítica. Es la causa del desempleo existente que está ya en un 7 % y si no hay una reactivación económica, podrá llegar al 8 % y posiblemente al 9 %.

Además de muchos problemas, como devolverle al país la credibilidad en sus instituciones, y a tener fe en la justicia, el asunto del salario mínimo es muy delicado, sea cualquiera decisión que tome el Ejecutivo, tendrá sus grandes efectos en la economía del país. Actualmente, Panamá tiene el mayor salario mínimo de toda Latinoamérica ($721.00), los más bajos corresponden a Nicaragua, Venezuela y Cuba con 115, 37 y 29, respectivamente. Si el actual salario mínimo se aumenta, como pretenden algunos sectores de izquierda, crecerá el desempleo. Si este se mantiene en los niveles actuales, provocará descontento en varios sectores, especialmente en los grupos violentos. Esto podrá ahuyentar las nuevas inversiones que requieren tranquilidad y paz en los países.

Al igual que existen muchas personas tratando de impulsar la economía para bajar el desempleo, es conveniente nombrar una comisión de alto nivel que estudie, con rapidez, las medidas que deben tomarse para reducir el altísimo costo de la vida.

El presidente Cortizo ha comenzado con buen pie. Sus nombramientos han sido acertados y la comunidad los ha visto con buenos ojos. Le falta todavía hacer algunos, como los tres magistrados y, especialmente, el nuevo procurador, que la ciudadanía confía en que este sea, al igual que hizo los otros nombramientos, con personas de amplias garantías de independencia, imparcialidad, carácter y conocimientos de la materia.

El presidente Cortizo, con sus palabras y principalmente con su actuar, le está dando al país los beneficios que trae el buen Gobierno: “No se ama a la patria con sobreprecios, no se ama a la patria con coimas. A la patria se le defiende. Esas coimas afectan al país. Fiscales, jueces, magistrados, no se deban a un presidente. Diputados, políticos, empresarios, que sus decisiones se basen siempre en el derecho. Porque la Patria la tenemos que hacer nosotros. El país tiene muchísima gente buena. Amar a la patria no es el juegavivo. Amar a la patria es la independencia de los órganos Ejecutivo, Judicial y Legislativo”.