El periodismo frente a nuevas tecnologías en medio del COVID-19

La crisis sanitaria que vive el país con el COVID-19 ha marcado un antes y un después en todos los sectores de la sociedad. En el periodismo, se pusieron en práctica las conferencias virtuales, dejando a un lado las aglomeraciones de las acostumbradas y kilométricas ruedas de prensa. Situación que al principio trajo un poco de incomodidad e incertidumbre a quienes nos dedicamos a este oficio; sin embargo, comprendimos que la medida era necesaria y que esto, es parte de las nuevas formas de comunicar.

Los medios de comunicación han recibido y aceptado las videoconferencias con algo de recelo, ya que la metodología implementada faculta la selección de algunos medios y no se permite la repregunta en caso de que el entrevistado evada el cuestionamiento o simplemente no se satisfaga con la respuesta. La repregunta es una herramienta fundamental que tiene el periodismo, sobre todo en momentos como estos.

Otro de los puntos importantes es que se limita la cantidad de preguntas de los colegas que logran participar, pero muchos ignoran la norma. Hay preguntas y respuestas extensas que en algunos casos se amerita.

A los periodistas nos corresponde estar abiertos al uso de nuevas tecnologías, ya que cada día tenemos un público que exige de nosotros preguntas bien formuladas, análisis de contenido coherente y de calidad.

Como sociedad debemos estar pendientes para que a través de estas nuevas tecnologías no se coarte la libertad de expresión y el derecho a la información.

Ante esta crisis sanitaria y también económica, cada ciudadano tiene un rol que jugar. El del periodista y de los medios están bien claro: divulgar la verdad, ser objetivos, no alarmar y ser un vehículo permanente de educación y de información confiable.