• 17/09/2020 00:00

José Dolores Moscote: forjador de la Universidad de Panamá

"A pesar de solo haber conocido su ciudad natal y Panamá, su carácter de autodidacta lo elevó como uno de los grandes intelectuales forjadores de nuestra nación"

José Dolores Moscote, nace en una modesta familia en Cartagena de Indias (Colombia), el 4 de abril de 1879. Ingresó a la Universidad de Bolívar de Cartagena, donde culminó en el año 1900 sus estudios de jurisprudencia, con el título de Doctor en Derecho y Ciencias Políticas. Estando en Colombia, se unió en matrimonio con Ana María Brid, de donde nacen cinco hijos: Graciela Adelaida, Rafael Eutimio, Ana Luisa, Alicia Dolores y Bertina.

En 1902, un año antes de la Independencia de Panamá de Colombia y con 23 años de edad, viaja con su esposa a Panamá, en búsqueda de nuevas oportunidades. Se inicia como maestro en la Escuela Primaria de Santa Ana. En 1906, fue nombrado oficial segundo de la Secretaría de Instrucción Pública; y en 1908, inspector de Instrucción Pública de la capital.

Fue profesor del Instituto Nacional en 1909, en donde impartió los cursos de Cívica y Moral, Sicología, Filosofía y Castellano. Además, fue rector del Liceo de Panamá, vicerrector y rector del Instituto Nacional durante seis años (1925–1931) período durante el cual instituyó los Sábados Literarios.

En 1918, participó en la creación de la Escuela Libre de Derecho, y como docente dictó cátedras de Derecho Constitucional, Filosofía del Derecho y Derecho Romano. Durante nueve años fue conjuez de la Corte Suprema de Justicia. Posteriormente, ocupó los cargos de primer secretario del Tribunal Superior del Primer Distrito Judicial, magistrado del Tribunal Superior y magistrado del Titular de lo Contencioso Administrativo. La visión política de su época la podemos valorar a través de la siguiente sentencia: “No creemos en la democracia política a base exclusivamente del sufragio universal y de componendas personalistas, en donde solo medran los intereses mezquinos de la clase que se cree llamada exclusivamente a la dirección del Gobierno”.

Moscote es considerado uno de los primeros constitucionalistas de nuestro país. Entre sus obras sobre este tema destacan: Introducción al estudio de la Constitución, Orientaciones hacia la reforma constitucional, Estudios constitucionales y El derecho constitucional panameño. Logró que se estableciera, en la Constitución de 1934, el principio de la propiedad, como función social. Preparó la exposición de motivos y proyecto de ley para la Jurisdicción de lo Contencioso Administrativo. Junto con los doctores Ricardo J. Alfaro y Eduardo Chiari, elaboró el Anteproyecto de la Constitución de 1946, en donde se introdujo el concepto constitucional de Autonomía Universitaria.

Su formación y experiencia le permitieron hacer significativos aportes en el área educativa. En este campo destacan sus obras: Discursos y conferencias, Páginas idealistas, Motivos, Una experiencia, Seis años de rectorado en el Instituto Nacional, Actividades prácticas del maestro rural, Aspectos de la civilización occidental, La educación nacional y la revolución de nuestro tiempo, El sentido actual de los estudios históricos y La vida ejemplar de Justo Arosemena.

Sobre la responsabilidad pedagógica de todo ciudadano sentenció: “Todos los hombres, en cualquier situación en que nos hallemos, estamos obligados en ser, y de hecho lo somos, maestros de los demás hombres”.

El Dr. Moscote, también dirigió y colaboró con diversos periódicos y revistas, entre ellos: El Diario de Panamá, El Tiempo, Revista Nueva, La Revista Instrucción Pública, Educación Nacional (junto a Octavio Méndez Pereira), La Antena y Revista Universidad.

El Dr. José Dolores Moscote, y el Dr. Octavio Méndez Pereira fueron fundadores de la Universidad de Panamá en 1935, en donde fue el primer decano de la Facultad de Derecho. Se le dio la distinción de Decano General, cargo creado por la Asamblea Nacional en 1936, con la finalidad de que fuera ejercido por el Dr. Moscote, en atención a sus servicios a la educación panameña. En 1956, se convirtió en el primer profesor Eméritus aprobado por la Universidad de Panamá. Como ejemplo de la importancia que le dio al ejercicio del magisterio, señaló: “Yo creo que enseñar vale más que gobernar, y que el verdadero hombre de Estado no es el que da leyes que no sirven para nada, sino el que se esfuerza por levantar la condición del hombre”.

La trayectoria de José Dolores, le permitió ser miembro fundador de la Academia Panameña de la Lengua, y un destacado miembro de la Academia Colombiana de Jurisprudencia. Recibió del Gobierno de Panamá la condecoración Vasco Núñez de Balboa, así como reconocimientos de los Gobiernos del Ecuador, Venezuela y Francia.

A pesar de solo haber conocido su ciudad natal y Panamá, su carácter de autodidacta lo elevó como uno de los grandes intelectuales forjadores de nuestra nación. Sus conocimientos se fueron dando en paralelo con el fortalecimiento de la nueva república y aporta al afianzamiento de la nacionalidad panameña. En la postrimería de su vida, recién operado y disminuida su movilidad por falta de una pierna, asistía, a pesar de todo esto, a la Universidad de Panamá para impartir su cátedra en la Facultad de Derecho.

Como un reconocimiento a su labor cultural, educativa y jurídica, se le ha otorgado su nombre a varias instituciones públicas: al colegio secundario Instituto José Dolores Moscote; a la biblioteca José Dolores Moscote, en el corregimiento de Bethania; y la Universidad de Panamá le otorga al auditorio de la Facultad de Economía, el nombre de Auditorio José Dolores Moscote.

El maestro José Dolores Moscote, a la edad de 77 años, fallece en la ciudad de Panamá, el mismo día de su cumpleaños, el 4 de abril de 1956. Después de su muerte, el periodista Eduardo Ritter Aislán, escribió: “José Dolores Moscote constituye una de las personalidades más definidas de la República y una de las aportaciones más excelsas de Panamá a la cultura de América”.

Rector de la Universidad de Panamá.
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