• 06/07/2022 00:00

Pasos que migran hacia lo desconocido

El hallazgo de un camión en cuyo contenedor había personas sin vida es el último capítulo de las historias absurdas que experimentan quienes migran hacia los Estados Unidos y que, como caminantes, pasajeros de todo tipo de transporte, entre ellos techos y espacios escondidos de trenes, sufren peripecias e iniquidades en su camino.

El hallazgo de un camión en cuyo contenedor había personas sin vida es el último capítulo de las historias absurdas que experimentan quienes migran hacia los Estados Unidos y que, como caminantes, pasajeros de todo tipo de transporte, entre ellos techos y espacios escondidos de trenes, sufren peripecias e iniquidades en su camino. Algunas estadísticas exponen que solo uno de cada cinco viajeros alcanza el objetivo trazado de llegar a salvo.

En ese vehículo encontrado en San Antonio de Texas, se descubrió a 53 difuntos y varios heridos. Estas personas provenían de México, Guatemala, Honduras. Otras, todavía no se determina su nacionalidad. Es una constante que no cesa; en 2019 hubo una cantidad de 1.8 millones de inmigrantes ilegales detenidos, mientras que, al año siguiente, la cifra bajó un poco a causa de la pandemia; aún así, hubo 404,6445, según los cómputos de Statista.

El Centro de Investigaciones PEW ha establecido que actualmente esa población de gente indocumentada establecida en aquella nación del norte alcanza once millones de personas. La mitad de ellos son mexicanos. La periodista María Pasquali afirma que las causas de la emigración residen en “la disparidad de oportunidades laborales y en el acceso a necesidades básicas como salud, educación y alimentación entre los países de la región.”

Jairo Acuña-Alfaro y David Khoudour en el artículo para el Fondo de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), “El potencial de la migración en América Latina y el Caribe”, afirman que “como resultado de la pobreza y la violencia, el triángulo norte de América Central se enfrenta a un número creciente de personas en movimiento.” Desde 2014, afirman ellos “se estima que 265,000 migrantes en tránsito” provienen de Centroamérica.

Es desde todo punto de vista un riesgo que muchos se atreven a aventurar en esos países. Lo extraño es que quienes parten hacia tierras estadounidenses, poco saben de lo que les espera en el camino. El 9 de diciembre de 2021 hubo un accidente en la carretera Corzo – Tuxtla Gutiérrez en Chiapas, cuando un camión que llevaba más de 160 viajeros, en su mayoría guatemaltecos, tuvo un percance en una curva con un saldo de 57 muertos y 105 heridos.

El vehículo siniestrado, con doble remolque y el otro, de San Antonio de Texas, ambos transportaban a centroamericanos en forma oculta. Esto demuestra que existe un tráfico que se mueve al margen de regulaciones, de cualquier control migratorio o de salud y que sólo una pequeña cantidad alcanza a llegar a destino. Allí, se encaminan preferiblemente a uno de seis Estados: California, Texas, Florida, Georgia, Nueva York, Illinois y Nueva Jersey.

Los objetivos de esta migración consisten en mejorar las condiciones económicas, aspectos sociales y de inseguridad política en sus países. En 2018, según el censo, había en Estados Unidos 44.7 millones de inmigrantes; entre 2000 y 2018 llegaron otros 20 millones. Los ilegales y sin papeles por lo general se involucran en trabajos en la agricultura con bajos salarios; en el campo existen normas que eliminan restricciones.

Asfixia, deshidratación, hacinamiento y altas temperaturas por un cálido verano en toda América del Norte son algunos factores que empeoran el trayecto. Además, la propia condición de ser ilegales y pasar por ríos, desiertos, desfiladeros, sitios de difícil acceso, a los que se encaminan por instrucciones de 'coyotes' que hacen el pingüe negocio. En el primer semestre de 2022 la cifra de fallecidos llega a 500 seres humanos.

Otra historia menos conocida corresponde a familias que proceden del sur del continente, Caribe y África; ellas intentan cruzar la selva colombiana para entrar a Panamá y seguir por Centroamérica. Éstas también experimentan una ruta peligrosa. Todos requieren políticas gubernamentales serias, coherentes e integrales, que tengan en cuenta las aristas de este conflicto que perjudica a los más vulnerables.

Periodista
Lo Nuevo
comments powered by Disqus