• 09/07/2011 02:00

¿El fin político de Bosco?

Cuando Bosco Vallarino corrió para alcalde, se desató una polémica sobre la viabilidad jurídica de esta postulación, por el hecho de que...

Cuando Bosco Vallarino corrió para alcalde, se desató una polémica sobre la viabilidad jurídica de esta postulación, por el hecho de que había adquirido una nacionalidad diferente a la panameña que deshabilitó su ciudadanía panameña.

Los diputados aliados dictaron la Resolución No. 2 de 3 de julio de 2009 que, al menos, ‘en apariencia legal’, le permitió correr y, finalmente, convertirse en alcalde electo.

Sin embargo, tres abogados recurrieron ante la Corte Suprema en contra de esta Resolución, y según se ha difundido, en el máximo ente de justicia circula un proyecto de fallo que declararía inconstitucional esta Resolución.

De ser cierta esta información, solo es cuestión de protocolo para que el Tribunal Electoral tome las medidas correspondientes para que el señor Bosco Vallarino cese de su cargo de alcalde.

Es curioso que quienes ‘forzaron jurídicamente’ que Bosco Vallarino fuese alcalde, hoy están confrontados, unos a su favor y otros en su contra, basado en las circunstancias y secuelas de la crisis que se desató por la referida postulación y por el deterioro o ‘fractura’ de la Alianza por el Cambio, sin menoscabo de que al momento de su postulación privó su ‘popularidad mediática’.

De ser removido el alcalde Vallarino, el partido Cambio Democrático, por medio de Roxana Méndez, quien es la actual suplente de alcalde, y, en su defecto, por otra persona designada por el Órgano Ejecutivo, asumiría el control de la Alcaldía del distrito de Panamá, lo cual podría agregar otra crisis más, si se llegasen a dar despidos masivos de personas que fueron nombradas por el alcalde en cuestión.

La ocasión es propicia para afirmar que ya está bueno de que los políticos solo actúen en base a sus ‘intereses creados’ y no en base a los ‘valores, institucionalidad, justicia, decencia y legalidad’.

Lamentablemente la clase política de siempre ignora que ‘... nadie corta un pedazo de un vestido nuevo y lo pone en un vestido viejo, pues si lo hace no solamente rompe el nuevo sino que remiendo sacado de él no armoniza con el viejo. Y nadie echa vino nuevo en odres viejos de otra manera el vino nuevo romperá los odres y se derramará y los odres se perderán. Más el vino nuevo en odre nuevos se ha de echar y lo uno y lo otro se conserva’.

Sacar a Bosco Ricardo Vallarino de la Alcaldía no es la solución final del problema de fondo que tiene el Municipio de Panamá.

*ABOGADO Y LOCUTOR.

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