• 01/06/2022 00:00

El valor de la cultura negra

Mayo es un mes dedicado a la cultura negra, la promoción de sus valores y sobre todo, el estímulo del vínculo con otros grupos que conforman la nacionalidad panameña.

Mayo es un mes dedicado a la cultura negra, la promoción de sus valores y sobre todo, el estímulo del vínculo con otros grupos que conforman la nacionalidad panameña. Es por eso que se confiere al país una singularidad social que se sustenta en el origen de cada componente humano que aquí llegó y se asentó históricamente.

Pese a todas las contingencias acaecidas a las diferentes migraciones negras (esclavos traídos por los colonizadores, trabajadores del ferrocarril y luego de las varias facetas del Canal de Panamá), ellas pudieron consolidar unos rasgos que fueron las partes constituyentes de su herencia. Eso les permitió mantener lengua y habla cotidiana, creencias, arte culinario, modas, nexos familiares y un enfoque de la vida diaria que les permitió comprender las claves de la sociedad local.

Para muchos, la población negra era un segmento que debía tener su propio espacio segregado y diferenciado. Pese a que este es un concepto propio de mentalidades que se han quedado en una vieja visión de la desigualdad, no se alcanzó a imaginar que tal separación era una oportunidad que permitió a los grupos que llegaron en busca de una esperanza de vida y nuevas oportunidades de trabajo agruparse para mantener núcleos comunes. Lo otro que no pudo obviarse fue la posibilidad que dichas comunidades asentadas tanto en la ruta del canal interoceánico como en determinados barrios urbanos y en provincias como Colón y Bocas del Toro, surgieran personalidades que aportaron desde su propia perspectiva en diferentes manifestaciones profesionales, artísticas, religiosas, deportivas y en disciplinas variadas. Esto, sin dudas, enriqueció y dio un brillo especial a los emprendimientos y a la unidad nacional.

Hubo episodios de la vida nacional que permanecen guardados como curiosidad y también brindan al país esa sorprendente atmósfera de especialidad. Una tiene que ver con los aportes de músicos panameños a los escenarios internacionales, por razón de una pujante vida nocturna y creativa presencia de colectivos. La otra tiene que ver con las ligas de deportistas negros, como es el caso del béisbol que repitió la experiencia de los estadios estadounidenses.

Igual sucedió con los periodistas, quienes entraron a las redacciones de los diarios y pudieron interpretar la realidad ístmica tanto en inglés, como en francés. Crearon de esa manera su propio universo semántico, que se enriqueció con una literatura que asentó sobre el papel, los rituales e historias de ancestros nacidos en otros territorios donde ríos, mares, selvas se llenaban del embrujo de una mitología que respondía a los misterios naturales, comunitarios e individuales.

Debe reconocerse que los aportes de poco a poco han ido nutriendo la realidad nacional, le dan esa particularidad, que no los distancia, sino que los convierte en un elemento activo para alcanzar esa identidad que nos caracteriza. La diversidad implica mayor riqueza y la necesidad de alcanzar consensos que reflejen esa condición y que permitan forjar una unidad en que no haya espacio para la desigualdad y desigual posibilidad en las oportunidades.

Esta situación es tan particular que afecta determinados escenarios del país. Niños que en todo el periodo preescolar se comunicaban con sus padres indistintamente en español e inglés y al llegar a la escuela adquirían una enseñanza solo en el primer idioma y debían mantener esa segunda lengua (que a veces era la primera en el hogar), solamente en su formato hablado y perder progresivamente la posibilidad de fortalecer y utilizar esa otra forma de expresión.

De todas formas, la suma de todas las cualidades propias de esta vertiente humana, ha sido un magnífico aporte para consolidar una sociedad que se ha visto involucrada en subsecuentes episodios para alcanzar su nivel de independencia plena y sin ataduras. En este camino, la cultura negra también ha desempeñado su papel y hecho resaltar valores, que ahora celebramos en mayo.

Periodista
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