Representantes de las diferentes actividades económicas del país alertaron sobre las consecuencias que se avecinan si los cierres continúan. Hicieron un...

- 18/05/2025 23:00
Para comprender la actual situación de los Estados Unidos, así como su impacto sobre el resto del mundo, resulta útil recordar, siguiendo una reciente expresión de John Bellamy Foster, que “el régimen neofascista de Trump es un acto desesperado de un imperio en decadencia”. A esto se debería agregar que por ser desesperado resulta riesgoso y peligroso.
Muchos pensadores, como es el caso de Paul Krugman (Premio Nobel de Economía 2008), piensa que estamos frente a una práctica económica claramente irracional. En un reciente artículo titulado Amiguismo, capitulación y caos, define a Trump como “un matón cobarde y bocazas que preside un caos absoluto.” Por su parte, Joseph E. Stiglitz (Premio Nobel de Economía 2001), en una forma más diplomática, ha declarado que la política arancelaria de Trump no cuenta con ningún respaldo en la teoría económica. También ha señalado que esa política no es más que un tiro en el pie para la economía norteamericana.
Todo lo anterior lleva a la necesidad de entender la naturaleza de las políticas económicas de Trump y su impacto tanto para la economía de Estados Unidos, como para el del resto de los países.
Para comenzar está el problema del impacto del alza de aranceles sobre la inflación a nivel norteamericano. En este caso existe un práctico acuerdo entre los más destacados economistas que estos darán lugar a un incremento directo en el costo de los bienes importados hacia Estados Unidos, generando una situación que se conoce como inflación por empuje de costo (Cost-Push inflation).
Más aún, la guerra comercial llevará a toda una distorsión y paralización de las cadenas de valor, que podrá generar un desabastecimiento y elevación de precios semejante a lo que ocurrió durante la pandemia. Esto ha llevado a que Krugman, con su proverbial buen sentido de humor, haya escrito un breve comentario titulado Trump Es un Virus (Trump Is a Virus, 24/04/2025).
El problema de las inflaciones provocadas por un choque de oferta, tal como el que se viene desarrollando gracias a la política de Trump, es que el mismo genera tendencias recesivas. En parte debido a que el incremento de precios disminuye la capacidad de consumo de las personas, de manera que la demanda efectiva real disminuye. También es cierto que la ruptura de las cadenas de suministro impacta negativamente el nivel de producción, mientras que la incertidumbre generalizada hace disminuir los niveles de inversión. El resultado es entonces una situación en que la recesión se combina con la inflación, lo que se conoce como estanflación.
Otro problema importante que surge del irracional caos de la política de Trump se refiere al zigzagueo de la política arancelaria de Donald Trump. En este caso lo que llama la atención es como una vez que se imponen aranceles a un nivel muy alto, Trump pasa a dejarlos sin efecto temporalmente, buscando que los diversos países, incluyendo a la República Popular de China, se rindan frente a las pretensiones imperiales, que pretenden mantener a Estados Unidos como potencia hegemónica política, económica y militar.
El problema aquí es que las respuestas de la mayoría de los países ha sido la de resistirse frente a las pretensiones de Trump, lo que es especialmente evidente en el caso del gobierno chino. Lo cierto es que, pese a que Trump ha anunciado en un tono triunfante que muchos países prácticamente están de rodillas solicitando realizar concesiones a Estados Unidos, lo cierto es que prácticamente estos acuerdos no se han concretado. En todo caso las ilusas y elevadas exigencias de Trump han significado una repuesta negativa de parte de muchos países. No es casual que Krugman haya escrito un artículo titulado Trump es el Padrino al revés (Trump is the Godfather in Reverse, 29/04/2025), señalando que este solo es capaz de hacer propuestas que todos tienen que rechazar. En realidad, lo único que ha logrado Trump con China es una tregua de 90 días de reducción mutua de aranceles.
La dificultad es que la actual política económica estadounidense además de estar generando presiones inflacionarias y recesivas capaces de contagiar al conjunto de la economía global, está generando un ambiente de incertidumbre que puede llevar a una crisis financiera internacional. En este sentido es que el Global Financial Stability Report del FM, al referirse a la política arancelaria de Trump, haya llamado la atención sobre la ampliada incertidumbre existente en los mercados financieros, lo que se refleja en la creciente volatilidad de los mismos.
Obviamente se trata de tendencias que tienen la capacidad de afectar muy negativamente el funcionamiento y los resultados de nuestra economía. Sin embargo, no existe absolutamente ninguna reacción del ministro de economía y finanzas sobre como el país va a enfrentar estas tendencias. El gobierno Mulino-Chapman parece entender que Trump es su verdadero Padrino, al que deben sumisión.