Lucha contra el narcotráfico o por la seguridad ciudadana

Con asombro vi al ministro de Seguridad referirse a los temas de seguridad ciudadana y narcotráfico, su actitud prepotente y su tono discordante no son más que el legado de funcionarios que se les va el puesto a la cabeza.

¿De qué grandes avances en la lucha contra el narcotráfico habla el ministro, cuántos banqueros han sido arrestados por lavado de dinero, cuántos testaferros están siendo juzgados, cuántos traficantes han sido arrestados, dónde están los nombres y los rostros da las mulas, cuántos apartamentos, autos, edificios, empresas han sido cauteladas por ser adquiridas con dinero sucio? Se nos vende la premisa de las capturas, posan con kilos y más kilos, los que sabemos algo del patrullaje que hacen los Estados Unidos con sus barcos en las supuestas ‘200 millas náuticas’ de nuestras costas en el Atlántico y el Pacífico sabemos que ellos dan la voz de alarma cuando ven una lancha rápida, sus aviones radar, que también hacen esas funciones, siguen reabasteciéndose en Tocumen; en fin, se sigue el trabajo que ya se ha hecho con los otros gobiernos.

¿Por qué el vociferar y casi rofear a los ciudadanos, restregando en la cara los mismos logros que ya se han tenido en el pasado, o es que no saben que la mayor captura de droga en el mundo se dio en nuestro país en marzo del 2007 con 19 toneladas incautadas? La seguridad ciudadana es el gran problema de este y de los gobiernos anteriores, se les ha dado mayor salario para que mejoren los policías, pero no ha mejorado el trabajo que realizan, se les dieron mejores autos para que tengan mayor presencia en la calles y no ha resultado, se les compraron juguetes caros como los Mustang y los BMW X6, robot antibomba, etc. Y nada de eso ha servido.

Al escuchar al ministro decir ‘vamos con fuerza y otros que se encarguen de los derechos humanos’, pienso cuánto hubiese durado un ministro que dijera eso en España, Francia, Alemania, Estados Unidos, Colombia ni hubiese salido del local donde lo dijo como ministro, lo hubiesen destituido en el acto, pues nadie está por sobre la Constitución o las leyes.

A nuestras autoridades pareciera que tampoco les interesa el control o la represión del crimen, porque aquí no se compran armas paralizantes como el Taser o las otras, solo se compran armas letales; y ¿saben qué?, tampoco han servido de nada, los criminales son los que reinan en las calles de Panamá, ¿a alguien se le ocurre caminar por Calidonia a cualquier hora, en Santana, en San Miguelito, Río Abajo, Juan Díaz, Curundú, etc.? A nadie que yo sepa, todos estamos encerrados en las casas, pues las calles son de los antisociales.

Los famosos retenes solo están para joder a los ciudadanos que entran por el Puente Centenario, los que salen de la Calzada de Amador o los que van por la calle 50. No apostamos por estar en un país más inseguro, el pueblo apostó por mayor seguridad. ‘Vamos a dar seguridad al pueblo’ decían en campaña los del CD, la pregunta es: ¿nos sentimos más seguros ahora? PERIODISTA, DIRECTOR DE NOTICIAS DE LA EXITOSA 95.3 FM.