• 01/09/2025 00:00

Una valiosa entrega para reflexionar

“Textos cotidianos para la opinión” es el título del nuevo libro del Profesor y articulista semanal de la Estrella de Panamá, Modesto A. Tuñón. La ´presentación de la obra tuvo lugar en la sala de usos múltiples de la Biblioteca Nacional, Ernesto J. Castillero el pasado jueves 28 de agosto. Las arcas literarias del país hoy reciben esta formidable obra de 140 artículos de opinión de la autoría del profesor Tuñón, que fueron publicados entre los años 2014 y 2024 en este diario.

Tuve el honor de decir algunas reflexiones en la presentación de la obra. Me referí a un planteamiento que hiciera el periodista estadounidense David Haynes cuando sugirió que: “Las redes sociales y la fragmentación de los medios, han cambiado las reglas del juego para todos los periodistas, escriban o no opiniones” (...) “La fragmentación significa que los medios tradicionales, como los periódicos, tienen algo menos de influencia que antes; simplemente, hay muchos lugares donde se puede buscar información”.

Si en realidad hay muchos otros lugares en donde buscar información, según señala Haynes, lo cierto es que esas informaciones no son siempre de buena calidad o fundamentadas en la verdad. Desde hace ya varias décadas, y cada vez más frecuente, hay sectores de poder que se valen de las noticias falsas para crear escenarios alternos a la realidad mediante diversos mecanismos para trasmitir y sostenerlas. Esos mensajes manipulados o sencillamente inciertos para ejercer algún grado de influencia sobre sectores de la comunidad han logrado crear un mundo alterno en donde hacer periodismo de opinión, serio y profesional, se ha convertido en un reto monumental.

Escribir artículos de opinión de buena calidad, profundas y reflexivas, no es fácil. Al periodista o escritor, le toca navegar en un escenario de resistencia en donde subrayo el enorme y difícil reto de escribir opinión en el marco sociopolítico y cultural en que vivimos, tanto aquí en nuestro querido Panamá, en América Latina ante los retos de supervivencia de muchos de nuestros países hermanos, así como ante las dificultades de guerra y muerte que se vive en algunas regiones del mundo y que para cualquier humanista sería difícil ignorar.

A mi parecer, El periodismo de opinión es la plataforma en donde los que lo ejercen periódicamente, tienen una responsabilidad de guiar a la comunidad: analizan eventos o situaciones locales o internacionales que tiene el potencial de afectarnos de manera positiva o negativa; Proponen ideas, rescatan figuras históricas para hacer un balance sobre su legado para el presente y el futuro; presentarnos personajes o grupos organizados que trabajan en sus respectivas disciplinas, para mejorar nuestra condición humana; y, al final: su intención siempre debe ser educar para contribuir con las trasformaciones necesarias para garantizar el bien común.

Además, con reflexiva y analítica ecuanimidad, el periodista de opinión propone una versión menos acelerada, pero más profunda, sobre noticias recientes luego de que la sociedad haya sido informada de ellas. Una de esas reflexivas frases del escritor Gabriel García Márquez señala que: “La mejor noticia no es siempre la que se da primero, sino muchas veces la que se da mejor”.

Sewell Chan, quien fuera hace algunos años editor de la página editorial de Los Angeles Times, supervisor del consejo editorial y de las secciones de opinión y opinión dominical del mismo periódico, señaló que: “A pesar de la abundancia de contenido de opinión, la escritura reflexiva y matizada sigue siendo escasa” (...) “En la era hiperpolarizada que vivimos, a veces parece que hay demasiadas opiniones. Pero, de hecho, no hay suficientes artículos de opinión bien pensados...”.

“Textos cotidianos para la opinión”. Es la excepción. Es una valiosa muestra del periodismo de opinión de este inicio del siglo XXI. Como verán en esta obra, el profesor Tuñón, en cada escrito —una y otra vez— muestra su compromiso de siempre presentar y atender hechos, eventos o retratar actividades o individuos que realmente marcaron o marcan la diferencia. Él es de ese muy reducido y selecto grupo de escritores que se sobreponen a lo común, para ofrecernos una visión sobre aspectos de la vida de la cual podemos aprender y reflexionar.

Para una sociedad que inició con tantos retos el camino por el siglo XXI; una sociedad llena de desafíos que arrastra desde el siglo pasado; una sociedad de dudas e incertidumbres, “Textos cotidianos para la opinión” es una obra literaria de gran valor. Es una obra para periodistas, para los estudiantes de periodismo, para investigadores, para los que saben y entienden que lo que circula en las redes sociales y flota por el ciberespacio no es confiable, si no hacemos el trabajo de verificar— varias veces— y volver a verificar. Es una obra de gran valor para los lectores que aprecian la buena escritura.

“Textos cotidianos para la opinión”, es un fino ejercicio periodístico que documenta la realidad que muchos quisieran obviar. Nos da otra mirada a esferas del desarrollo humano. Destaca los tejidos que sostiene nuestras esferas multiculturales para que podamos ser reconocidos como una sociedad incluyente —espejo de nuestra realidad— con espacio, participación y oportunidades para todos.

Enhorabuena, profesor Modesto A. Tuñón, por este nuevo y valioso a aporte a la literatura nacional.

*El autor es comunicador social
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