El Festival de Debutantes se realizó el 5 de julio en el Club Unión de Panamá. Es organizado por las Damas Guadalupanas y se realiza cada año para recaudar...
- 05/11/2020 00:00
Manipulación mediática
De las elecciones en Estados Unidos se puede concluir con una verdad absoluta: ¡el gran perdedor! Y es que los grandes medios de comunicación social se volcaron en una frenética campaña pro-Biden, acomodando sus predicciones con encuestas y gurús de “los que nunca se han equivocado”, pero al final era toda una estratagema para manipular la opinión pública. En todo el sentido amplio de la palabra, el mundo ha vivido el fraude más grande de la historia democrática de los Estados Unidos. Y no se trata del fraude electoral en sí; es el fraude mediático que debilitó una arquitectura electoral que ha permanecido firme por décadas. Estados Unidos, con esta elección, ha pasado al montón de los países latinoamericanos donde el juegavivo es lo común, con sistemas presidencialistas que han sumido a la mayoría de la sociedad en una desigualdad espantosa. Los últimos años, con el advenimiento de la globalización y la teoría de un “nuevo orden mundial”, Estados Unidos e Inglaterra sufrieron en carne propia cómo sus ciudadanos perdían poder adquisitivo, mientras que las grandes corporaciones se hacían más ricas. Ese choque entre el ciudadano de a pie y la nueva realidad económica producto de la globalización trajo a Trump y provocó el “brexit”. Aunque se declare a Biden ganador o que repita Trump, eso ya no es lo importante. Lo importante es que la hegemonía de Estados Unidos está debilitada internamente. Lo irónico es que lo que no hicieron ni la Guerra Fría ni los enfrentamientos en Oriente Medio, lo han logrado los medios: dividir a la sociedad estadounidense por la manipulación descarada. ¡Así de simple!