Pendientes

El deterioro paulatino de la educación, la salud, el servicio de agua potable, la seguridad, la agricultura y otros aspectos nos ha arrinconado como sociedad. Lamentable es lo poco que se hace para solucionar estos problemas. Los gobernantes quieren utilizarlos para sacarle un rédito político. Atrás quedaron sus promesas de llegar al poder para ayudar en el avance de la sociedad, porque lo que buscan es perpetuarse en el cargo para seguir pelechando de la cosa pública. ¡Y esta parece ser una nueva moda en América Latina! El actual quinquenio gubernamental pasará como el que más se invirtió en infraestructura. Panamá entra en la vorágine electoral y sea cual sea el candidato presidencial que gane, tiene pendientes que resolver: Educación, agro y justicia. Pasar nuevamente cinco años en los que a la educación no se le mete mano es condenar a la sociedad a un deterioro rotundo en los próximos 15 años. Han sido años donde los sucesivos gobiernos optaron por promover las importaciones so pretexto de que la competencia nos haría más eficientes y resultó todo lo contrario. ¡Abandonamos el campo! Y qué decir la justicia. Aquí no hay justicia, porque los fallos se compran. Esto hay que acabarlo ya.