No perder el tiempo

El diálogo por la Caja de Seguro Social es una alternativa civilizada para lograr consensos, sobre las propuestas que lleven a salvar esta institución del colapso inminente. Y el tiempo es oro, de manera que entre menos lo perdamos, mejor nos irá. Al margen de la limpieza general que hay que hacer respecto a la cantidad de funcionarios que se necesitan, la Caja tiene que sacudirse de todas esas prácticas corruptas en la compra de medicamentos e insumos de todo tipo. Tiene que funcionar como una empresa eficiente en todo el sentido de la palabra y liberarse de personas que lejos de ayudarla con su sapiencia y honestidad, la sangran y utilizan para sus ambiciones personales. ¡Que es difícil encontrar la salida!, es lógico y normal, porque los problemas de la Caja son complejos y no permiten “curitas” y decisiones a media. Hay que intervenir y curar. Y para eso es el diálogo, para debatir las mejores alternativas de cura y aprobar la que le devuelva la estabilidad financiera sostenible en el tiempo. Y entre más rápido se decida, menos nos cuesta. Es un momento crucial y no perderlo por debates estériles es ser inteligente, porque la Caja lo necesita. ¡Así de simple!