• 14/08/2020 00:00

Reconciliación nacional

Opinión editorial del 14 de agosto de 2020

La historia nos ha dejado ejemplos donde hombres que sufrieron las más terribles vejaciones y maltratos, al momento de tener el poder su decisión fue optar por la reconciliación y la paz, en lugar que cobrar venganza y sembrar odios. Panamá tiene que cerrar heridas, pero lejos de hacerlo, la sociedad está bombardeada por odios y rencores entre grupos, muchos de ellos hasta familias, lo que fomenta la división y aleja la reconciliación. No obstante, hay que recobrar esos ejemplos de grandes hombres como Nelson Mandela, quien permaneció 27 años en la cárcel y luego de su liberación, lejos del rencor y el odio, propuso la paz, la reconciliación y la unidad de Sudáfrica. Su Gobierno, 1994-1999, se dedicó a desmontar la estructura social y política heredada del apartheid a través del combate del racismo institucionalizado, la pobreza y la desigualdad social, y la promoción de la reconciliación social. El uruguayo José Mujica es otro gran ejemplo. Pasó casi quince años de su vida en prisión. En la cárcel, sufrió el aislamiento y duras condiciones de detención y en esa situación permaneció once de los quince años. Mujica, pese a todo su sufrimiento y dolor, llegó luego a la Presidencia de su país (2010-2015) y en lugar del odio y el rencor, optó por la unidad y la reconciliación. Panamá es un gran país, pero tiene que lograr la reconciliación nacional para que pueda desarrollar su sociedad y en estos momentos es bueno traer ese desprendimiento y sentido de humanidad de Mandela y Mujica. ¡Así de simple!

Lo Nuevo
Suscribirte a las notificaciones