El que no la debe...

La decisión de la Corte de reabrir el Caso CEMIS fue un avance en materia de transparencia, ya que la consigna de los últimos años era enterrar este caso. Lo irónico es que uno de los involucrados, el ex legislador Mateo Castillero, ha reiterado que él no le teme a las investigaciones y ha negado reiterativamente que haya sido parte en el mayor escándalo de corrupción de l a última década, pero es él quien ha interpuesto recurso tras recurso para impedir que la reapertura se haga realidad. Si no teme, entonces ¿por qué entorpece? Igual pasa con el abogado del citado ex legislador, quien en otros casos se la pasa abanicando transparencia, pero en éste lo que promueve es oscuridad. Aquí hay que predicar con el ejemplo, y ambos, tanto abogado como ex diputado, deben desistir de tantos recursos y dejar que la investigación fluya sin obstáculos..