El Veto

Los últimos días el presidente Martinelli los pasó en Grecia, mientras la Asamblea Nacional aprobaba en un dos por tres un proyecto que introdujo modificaciones en nueve materias distintas. Pese al rechazo de todos los sectores de la sociedad, el proyecto fue aprobado sin mayor reparo. Ahora queda la esperanza de que el presidente -de regreso de la cuna de la democracia- vete el proyecto aprobado por los diputados. Y es que la sociedad siente que el gobierno la traicionó, porque temas tan sensitivos, que merecen un exhaustivo debate, fueron aprobados de un ramplanazo y en medio de la euforia del fútbol. Lo cierto es que acciones como ésta van creando un clima de desconfianza con el gobierno y en lugar de favorecer el autoestima de la sociedad, le bajan la moral. No porque se tenga la aplanadora legislativa se tienen que aprobar las cosas sin mayor debate. Las consultas son sanas y necesarias. Bien haría el presidente en atender este llamado y vetar este proyecto recién aprobado.