Volver a empezar

Aunque fue necesario que pasaran siete meses, la decisión de arreglar los inconvenientes en la ley de titulación es siempre bienvenida. La lentitud en el proceso de titular la tierra y las dificultades por la famosa tabla de precios, le han mostrado al gobierno que lo mejor en este tema es volver a empezar. Hoy empieza el debate. Ojalá esta vez termine con una ley que cumpla la promesa de entregar gratis, a panameños humildes, los títulos de propiedad sobre la tierra que por años protegieron y trabajaron. El nuevo impulso debe escuchar a todas las partes y tomar sus propuestas en cuenta. Pensar más en los que únicamente tienen la tierra como sustento y encontrar otras fórmulas que protejan al sistema de los acaparadores. Pero además debe propiciar una discusión sosegada del tema, que se centre en la realidad de la mayoría, sin prejuicios, con un amplio sentido de justicia y cuyo objetivo debe ser, como prometió el presidente cuando era candidato, entregarle la tierra al que la trabaja. Las partes involucradas, sin pensar en los errores cometidos en el primer intento de legislar sobre el tema, deben poner todo su esfuerzo en que esta vez se logre la mejor ley.