¡Qué equivocación!

Equivoca el gobierno su actuación contra las empresas del presidente fundador del diario colega ‘La Prensa’, Roberto Eisenmann. Pretender que la sociedad panameña crea que el secuestro del hotel Coronado es un asunto de evasión de impuestos es no conocer a los panameños. Sí, porque lo que el gobierno ha logrado con esto es que el tema del ataque a la libertad de expresión sea una preocupación internacional. Peor aún cuando desde hace dos semanas se ataca al presidente de ‘La Prensa’ desde un diario colega considerado pro gubernamental. Es lamentable que Panamá esté creciendo a un ritmo envidiable, pero el deseo de transformar el gobierno en despótico nos esté amenazando seriamente la democracia. Lo irónico es que las actuales autoridades lo que menos hacen es honor al nombre del partido oficialista, pues aquí ha habido un retroceso en materia de institucionalidad que ni siquiera semeja un verdadero cambio democrático. Todos estamos alerta, porque no vamos a permitir que se regrese a prácticas del noriegato. ¡Alto a los atropellos! ¡Pensemos en Panamá primero!