Elecciones impugnadas

Como un servicio social a la comunidad y a la democracia panameña, hemos estado publicando las irregularidades cometidas con el presupuesto del Estado, que se nutre, entre otros recursos, con los impuestos que tributamos los contribuyentes, y que se utilizaron para financiar las dádivas electoreras a favor de candidatos oficialistas u ‘opositores’ con simpatías dentro del oficialismo. Tanto el presidente de la República, como los más conspicuos miembros del Partido Cambio Democrático han pretendido descalificar todas las impugnaciones presentadas contra sus candidatos, llegando hasta a espetar que ‘no se dejarán quitar las curules’. Lo cierto es que le corresponde solo al Tribunal Electoral, como ha sucedido desde siempre a partir de la recuperación del sistema democrático de gobierno, determinar si en algunos de los circuitos impugnados se cometió delito electoral que viciara el voto depositado en las urnas el pasado 4 de mayo. Ya hay antecedentes, y no solo durante esta administración. Permitamos que los magistrados Pinilla, Valdés y Araúz hagan su trabajo y que, en caso de que se requiera repetir las elecciones, las condiciones bajo las cuales se lleven a cabo, sean lo transparentes y equitativas que prevé nuestro ordenamiento electoral.