La unidad del país

Ya los panameños atravesamos una dura etapa durante la dictadura, durante la cual, a finales de los 80, la intolerancia reinaba y eso causó hasta la muerte a muchas personas. Vino la invasión aquel diciembre de 1989 y un nuevo Gobierno se instaló. Por desgracia, los nuevos líderes del país desaprovecharon el momento para redactar una nueva Constitución y siguieron gobernando con la que hasta hoy existe. Treinta años han pasado y la sociedad panameña vuelve a esa división, donde reina la desconfianza, la intolerancia y la corrupción. Estamos en la línea de caer en el abismo o alejarnos de él. El presidente Laurentino Cortizo ha convocado a un gran diálogo nacional, para llegar al Acuerdo del Bicentenario y el momento es oportuno para mandar un mensaje al mundo de que los panameños, por más diferencias que tengamos, anteponemos nuestros intereses por el bien de la nación. Es lógico que salgan detractores, que son esos mismos que lucran con el caos, esos que siempre impiden hacer, porque les va bien con lo que hay, aun cuando la gran mayoría del país reclama más equidad y oportunidades. Por fortuna, los líderes de los principales partidos políticos han manifestado su disposición a llegar a acuerdos. Es una bonita oportunidad para elaborar nuestro plan para el país, que nos lleve a la gran meta de alcanzar el grado de desarrollo en un plazo no muy lejano. Que este noviembre en pandemia sirva de fecha clave para recordar en la historia que los panameños nos unimos para alcanzar por fin la victoria. ¡Así de simple!