Año de elecciones, Mundial y aniversarios

El próximo año habrá un nuevo presidente. Eso es definitivo. La gran incógnita es quién será. En la lucha por alcanzar la silla presidencial, los políticos utilizarán sus últimos recursos para lograr la preferencia popular. Oficialmente, la competencia es entre cuatro (Arias, Varela, Navarro y López); sin embargo, aunque algunos no consideran que hagan mayor diferencia a la hora de decidir los resultados, a partir de enero las opciones aumentan con la oficialización de los candidatos independientes.

Aparte de quiénes serán los candidatos sin partido, la otra novedad será el anuncio de los diversos aspirantes a la vicepresidencia, nominaciones que han generado amplios rumores.

Mientras llega el día de las elecciones más caras de nuestra historia —la cifra ronda los $50 millones— el ambiente político se encuentra más convulsionado que nunca: Las acusaciones de utilizar recursos del Estado para proselitismo, las críticas a la labor del Fiscal Electoral, y al sistema de Justicia en general, están a la orden del día. Del otro lado, luego de un fallido intento por establecer una alianza de oposición para una candidatura única, el Gobierno acusa a algunos empresarios y a los candidatos del Panameñismo y del PRD de burlar la voluntad popular y querer repartirse el país como si fuera su finca.

Todo esto, sin mencionar la guerra interna que hay en el PRD, donde el grupo conocido como ‘los dinosaurios’, liderado por Mitchell Doens y Francisco Sánchez Cárdenas, se ha encargado de atacar constantemente a Juan Carlos Navarro e, incluso, s olicitar su declinación.

A la vez que todo esto ocurre, sectores de la sociedad civil y la Iglesia piden mesura a los políticos en una campaña que augura subirá aún más de tono.