Hamás libera a varios rehenes en el primer día de tregua en Gaza

Varios rehenes israelíes y extranjeros, capturados en suelo israelí por milicianos de Hamás y llevados a la franja de Gaza, fueron liberados este viernes en el marco de un acuerdo entre Israel y el movimiento islamista palestino, que también incluye la entrada en vigor de una tregua.

Una fuente de los servicios de seguridad israelí indicó a la AFP que “13 rehenes israelíes” habían sido liberados y que, según el ejército, ya se encontraron en Israel.

Entre las personas liberadas hay cuatro niños y seis mujeres, según una lista oficial israelí. Los rehenes “se han sometido a exámenes médicos iniciales en territorio israelí”, señaló un comunicado castrense.

Dos fuentes cercanas a Hamás indicaron que los cautivos fueron entregados al Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) en la franja de Gaza, antes de su traslado a Egipto.

En paralelo, y al margen del acuerdo inicial, Tailandia anunció que varios tailandeses fueron también liberados. Tanto el país asiático como Israel afirmaron que los liberados eran 12. Sin embargo, según Catar, uno de los mediadores del acuerdo junto a Egipto y Estados Unidos, eran 10.

El acuerdo sellado el miércoles con ayuda de Catar inició una tregua de cuatro días prolongables y el intercambio de 50 rehenes cautivos en Gaza por 150 presos palestinos en Israel.

En virtud del acuerdo se liberó también a “39 mujeres y niños detenidos en prisiones israelíes”, confirmó un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores catarí.

La cifra fue confirmada a la AFP por el Club de Prisioneros Palestinos, una oenegé que defiende a los encarcelados palestinos.

Según el CICR, deben ser trasladados a Cisjordania, un territorio ocupado por Israel desde 1967.

La tregua y la liberación de rehenes se producen tras 49 días de una guerra que se desencadenó el 7 de octubre. Ese día, los milicianos islamistas mataron a 1.200 personas, en su mayoría civiles, y secuestraron a unas 240 personas en el sur de Israel, según las autoridades israelíes.

El Estado hebreo bombardea desde entonces la franja de Gaza, gobernada por Hamás desde 2007. El grupo islamista afirma que los ataques aéreos ya han causado la muerte de 14.854 personas, entre ellos 6.150 niños.

“Estamos decididos a traer de vuelta a todos nuestros rehenes”, aseguró el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, tras la liberación de las 13 personas.

La tregua entre Israel y Hamás en Gaza entró en vigor este viernes y constituye el primer signo de distensión tras semanas de guerra.

Al amanecer, miles de personas que habían huido a zonas cercanas a la frontera hacia Egipto se prepararon para volver a casa.

Entre ellos estaba Omar Jibrin, un joven de 16 años, que minutos después del inicio de la tregua salió de un hospital del sur del territorio donde se había refugiado con ocho familiares. “Me voy a casa”, dijo a la AFP.

En el cielo, los aviones israelíes lanzaron octavillas de advertencia: “La guerra no ha terminado (...) Volver al norte está prohibido y es muy peligroso”.

En el sur de Israel, 15 minutos después del inicio de la tregua, las sirenas de alerta antiaérea se activaron en varias localidades cercanas a la frontera con Gaza, dijo el ejército sin dar más detalles.

Hamás “ha anunciado un cese completo de las actividades militares” por cuatro días, durante el que 50 rehenes serán liberados. Por cada uno de ellos, “tres presos palestinos” serán excarcelados, indicó.

Maayan Zin supo el jueves que sus dos hijas no formaban parte de los rehenes que serán liberados el viernes.

“Es increíblemente difícil para mí”, dijo en la red social X, aunque se mostró “aliviada por las otras familias”.

Israel difundió una lista de 300 palestinos (33 mujeres y 267 menores de 19 años) que pueden ser excarcelados. Entre ellos hay 49 miembros de Hamás.

La comunidad internacional celebró el acuerdo y confía en que sea un primer paso hacia un alto el fuego duradero.

Pero el Gobierno y el ejército israelí dijeron que “continuarán” los combates para “eliminar” a Hamás una vez culmine la tregua.

“Tomar el control del norte de la franja de Gaza es la primera etapa de una larga guerra y nos preparamos para las siguientes fases”, dijo el portavoz del ejército Daniel Hagari.

El embajador palestino en la ONU, Riyad Mansour, declaró que la tregua “no puede ser solamente una pausa” y pidió usar este respiro para impedir la reanudación de los combates en Gaza.

Las hostilidades persistieron hasta el último momento. Dos horas antes del inicio de la tregua, un responsable del gobierno de Hamás dijo a la AFP que soldados israelíes “realizaron un asalto al hospital indonesio” en Gaza, donde hay unos 200 pacientes.

Los bombardeos devastaron el territorio palestino y han desplazado a 1,7 de sus 2,4 millones de habitantes, según la ONU, que denuncia una grave crisis humanitaria.

La población se encuentra desde el 9 de octubre en un “asedio total” por parte de Israel, que ha cortado los suministros de comida, agua, electricidad o medicamentos.

La tregua debe permitir la entrada de “un mayor número de convoyes humanitarios y de ayuda, incluido combustible”, según Catar.

Pero un grupo de oenegés internacionales aseguraron que será “insuficiente” para llevar la ayuda necesaria y reclamaron un verdadero alto el fuego.

La guerra toca también la frontera norte de Israel, donde en las últimas semanas se registraron intercambios de disparos de manera casi diaria entre el ejército israelí y el movimiento libanés Hezbolá, aliado de Hamás.