Una deuda que supera los $70 millones reclaman a las autoridades del Ministerio de Desarrollo Agropecuario (MIDA), los productores de arroz de la región...
- 08/03/2009 01:00
PANAMÁ. El luto, el dolor y la desesperación abraza a los pobladores de Jaqué, Darién por la tragedia del 4 de marzo en Punta Caracoles, donde la niña de 13 años Nilka Pulgarín falleció, 15 personas fueron rescatadas y 11 todavía están desaparecidas.
A tres días de aquel trágico suceso, el operativo de búsqueda continúa sin dar hasta el momento con ninguno de ellos. Las madres desesperadas al ver como pasa el tiempo sin obtener alguna noticia, ayer le pidieron al presidente de la República, Martín Torrijos que envíe más embarcaciones para que encuentren a sus seres queridos.
Durante el recorrido que ayer realizó Torrijos por Jaqué, en compañía del director del Servicio Nacional de Fronteras, Frank Ábrego; la ministra de Desarrollo Social, María Roquebert y del representante del corregimiento de Jaqué, Francisco Moreno, tuvo la oportunidad de compartir el dolor de los moradores, conversó con las madres y les dejó un mensaje de solidaridad y apoyo por el naufragio de la embarcación "La Práxedes".
"Hemos estado dando un abrazo de solidaridad y haciendo un esfuerzo humano en este proceso, para que la búsqueda se haga en coordinación con los organismos de seguridad, socorro y auxilio, así como la Cruz Roja y Protección Civil", dijo Torrijos.
Aseguró que habrá todo el apoyo y respaldo a los familiares de los que aún se encuentran desaparecidos y dio instrucciones para aportar atención y soporte emocional a las familias.
De las 11 personas desaparecidas, dos son niños y nueve pertenecían al Atlético Jaqué Fútbol Club, que fue organizado por el sacerdote Abdiel Juárez, responsable de la zona misionera de Jaqué.
Estos jóvenes, según el padre Juárez, soñaban con tener su equipo y lucharon por sacarlo adelante en esta población tan alejada, en donde hay más de 20 cantinas y la droga entra y sale, por lo que "el deporte era la única alternativa para alejarlos de todas estas situaciones".
La tragedia ha hecho que los residentes de Jaqué se unan en cadenas de oración y en vigilias. El viernes en la noche hubo un lucernario [procesión con luces] donde asistió mucha gente. Ayer se hizo el rosario de la aurora y se ha trasladado a la Virgen Del Carmen al puerto. “Allí estará hasta que aparezcan los cuerpos para darle cristiana sepultura", dijo el padre Juárez.