Una Maleta Viajera que descoloniza la educación

La Maleta Viajera es una herramienta didáctica que usa el arte como excusa. Pero este dispositivo físico, que nació de una educadora, un biólogo y un diseñador, replantea el concepto de educación como lo conocemos hasta ahora.

Para Manuela Alarcón, Directora de Educación y Programas para públicos del Museo de Arte Moderno de Medellín (MAMM), en la contemporaneidad uno no puede decir que va a llegar a ilustrar a nadie. Cuando elaboraban la Maleta, no pensaban en la idea colonizadora en el que alguien llega a mostrarle a ‘los que no saben' que ‘este es su patrimonio, miren qué belleza, es que estos sí son artistas'.

Todo lo contrario. La Maleta se concibió tratando de utilizar los elementos del arte contemporáneo y el patrimonio que el museo alberga, para generar recursos didácticos, específicamente para las poblaciones alejadas de los centros urbanos. No para que conozcan aquello que no conocen, sino para que se reconozcan a través de estos dispositivos y, por supuesto, a través de esto conocerán de arte.

‘Yo creo que es mucho más importante saber de biodiversidad, conocer a su comunidad y estar feliz en la escuela, que saber los nombres de los artistas del Museo de Arte de Medellín', formula Alarcón, quien estudió Diseño Industrial y tiene una Maestría en Teoría del Arte y el Diseño de Universität Duisburg-Essen, Alemania.

¿QUÉ HAY DENTRO DE LA MALETA?

En su interior hay varios objetos didácticos. La Maleta está inspirada en el artista moderno Armando Tejada, que pertenece a la colección del MAMM, quien recorrió el país haciendo dibujos en su libreta.

Inspirados en el recorrido del autor por la diversidad cultural y natural de Colombia —explica la representante del MAMM en una ponencia en Ciudad del Saber—, empezaron a investigar acerca de esos lugares y de cómo ese conocimiento podría enriquecer a las comunidades donde llegara la Maleta.

El proyecto está enfocado en las escuelas. En el momento que se entrega una Maleta a una institución, va acompañada de una cartilla en la que se le sugiere al docente cómo utilizar los recursos de su interior. ¿Cómo el arte puede ayudar a enseñar matemáticas? En la cartilla hay unos ejercicios con polígonos para que a través del dibujo y formas expresivas, se pueda enseñar esta rama de la ciencia, por ejemplo.

Cuatro juegos enseñan sobre biodiversidad, conservación y hasta lenguas del territorio colombiano. ‘Lenguas activas —aclara Alarcón—, no estamos hablando de un patrimonio de los antepasados que murieron y que ya no están, sino elementos que todavía prevalecen en la cultura de los habitantes'. Se suman instrumentos musicales que aún se utilizan en varias regiones del país e, indudablemente, reproducciones de las obras de Armando Tejada.

Prismas, trompos de colores y recomendaciones para ejercicios de dibujos con los alumnos. Son herramientas para conocer los animales de ecosistemas como manglares o acerca de las gastronomías colombianas. ‘Aquí nadie va a salir experto en manglares, pero es una aproximación y, sobre todo, una valoración de eso', detalla la directora de Educación del MAMM.

‘En una de las entregas uno de los chicos hizo un mapa de cómo es su población', añade. En ningún momento se habla de cómo es la comunidad por fuera, sino que la intención de las herramientas es ayudar a pensar qué es lo que tenemos a nuestro alrededor, cuáles son las danzas de mi región y conocer las de las regiones cercanas.

La Maleta Viajera ha llegado a 40 municipios de Antioquia, departamento de Colombia al que pertenece Medellín, repartiendo 116 Maletas desde 2009. El fin es dinamizar las estrategias en clase en los lugares donde el Estado regularmente está ausente.

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‘Trabajamos con la metodología de laboratorio, una metodología en la que se desarrolla la creatividad, antes que el perfeccionamiento de las intuiciones estéticas preestablecidas',

MANUELA ALARCÓN

MUSEO DE ARTE MODERNO DE MEDELLÍN

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MUSEO DE ARTE MODERNO DE MEDELLÍN

El papel de los museos hoy

El Museo de Arte Moderno de Medellín (MAMM) se fundó hace 37 años. En esta región de Colombia hubo un periodo en el que todas las fábricas se concentraban en el centro de la ciudad, según cuenta Manuela Alarcón, directora de Educación en el MAMM.

Pero luego de un plan de reordenamiento territorial, las compañías tuvieron que irse a las afueras de la ciudad y en 2009 el MAMM se alza en lo que había sido una antigua siderúrgica.

El museo cuenta con áreas de educación y curaduría, que trabajan de forma constitutiva. Una de las estrategias que destaca Alarcón es la alianza publico-privada, un modelo bastante fuerte en la región. ‘Son interesantes porque permiten muchas cosas que solo con dineros públicos no se pueden lograr', agrega. Y al estar aliado con el sector público, de alguna manera vincula a la institución con lo gubernamental, con el Estado. Esta alianza hizo posible la parte posterior del museo que exhibe una arquitectura industrial. El cuarto piso tiene tres salas de exhibición y el resto son un laboratorio para trabajos con niños, uno para experimentación sonora y laboratorios con jóvenes, un gran teatro y espacios para trabajos de grupos.

La también directora de Programas para públicos del MAMM dilucida que se ve una vocación, una carencia que había en la ciudad y a la que trata de responder el museo. ‘El museo no dice ‘bue no, aquí nos llegó la sabiduría, este es nuestro patrimonio, miren qué bonito', sino que realmente se prepara para que dentro del museo pasen cosas, que es el alma de los museos de arte contemporáneo', puntualiza.

Aunque continuamente están ensayando metodologías, en la medida de lo posible tratan de no impartir los talleres en la forma tradicional. No es que tienen el conocimiento y van a darlo, sino que tratan de generar espacios de trabajo colectivo. ‘Trabajamos con la metodología de laboratorio que, siguiendo a Leslie García, es una metodología en la que se desarrolla la creatividad, antes que el perfeccionamiento de las intuiciones estéticas preestablecidas', concluye.