Fonseca: ‘La xenofobia es un mal que estamos padeciendo’

El artista colombiano conversa con este medio acerca de su más reciente canción junto con Rubén Blades, habla de migración y de su conexión con Panamá

El cantautor colombiano Fonseca levanta la bandera de la empatía y la humanización de los migrantes durante una entrevista con La Decana. La conversación sirve para promocionar el tema más reciente lanzado por el artista junto con Rubén Blades, Nunca me fui, un tema dedicado a la migración.

“El mensaje principal de la canción es que sin importaren donde uno esté, mi corazón siempre estará en esa tierra que me vio nacer. De donde vengo nunca me fui. Pero a la vez es un mensaje de esperanza. Hay un llamado también a la empatía. Que ojalá sea realmente tomar acción y que la empatía sea de verdad. Pues hoy vivimos en un mundo de migración y desafortunadamente la xenofobia es un mal que estamos padeciendo”, comparte el artista.

Añade que al migrante no se le puede ver como “una cifra, sino realmente como una realidad, y esta canción es eso, humanizar al migrante. Que todos siempre tengamos muy presente que ese migrante lleva en sus espaldas sueños, pero también nostalgia, tristeza y recuerdos”.

Sobre la oportunidad de grabar junto a Rubén Blades, el intérprete de Arroyito confiesa que el día en que estuvo lista la canción, escrita, soñó “desde lo más profundo” de su corazón que el maestro Rubén Blades le aceptara la invitación.

“Le envié la canción y fue muy especial porque al muy poco tiempo aceptó la invitación, no solamente eso, sino que a los ocho días estábamos grabando. Ahí entró él también a ser parte de la canción y además de proponer y participar en toda la composición”.

Fonseca hace hincapié en que “lo más importante es que Rubén Blades ha sido siempre un portador de mensajes muy poderosos y que él se haya sumado a este nos ayuda a amplificarlo y a que todos esos migrantes que vivimos fuera de nuestra tierra alrededor del mundo, la canción les llegue como un bálsamo de esperanza, de gratitud, de respeto hacia ellos y de admiración.

La composición

Para el artista colombiano la música y la composición siempre tienen “una magia inesperada, te sientas en una sesión y, de repente, surgen temas que ni estabas pensando ni buscando. Así fue con esta canción. Inicialmente empezamos a escribirla con Andy Clay, que es un productor y compositor cubano, junto a Joel Enríquez, que es puertorriqueño, y Navales, que es bogotano. Todos coincidimos en algo: llevamos muchos años viviendo fuera de nuestros países. De ahí nace la canción, de ahí nace la inspiración”.

Nunca me fui suena a salsa, a Colombia, a acordeón. Un tema latino.¿Cómo escogieron los ritmos? “La melodía, la música siempre habla. Es algo demasiado importante, cuando eres un compositor, entender hacia dónde te lleva esa melodía. Entonces, la canción inicialmente sí nos llevaba a que tuviera ese ritmo de la salsa muy presente. Pero es ahí cuando te empiezas a dar cuenta de cómo los géneros pueden convivir en un mismo espacio de una manera maravillosa, es lo mejor”.

“El acordeón entró a ser parte también de esta canción y, para mí, ahí es donde una colaboración realmente se vuelve una colaboración en todo el sentido de la palabra. Ese se encuentro de dos mundos, fuimos mezclando y volviendo ese sancocho,que lo tenemos tanto en Panamá como en Colombia, una mezcla perfecta”.

Hablando de la migración y de llevarse siempre un pedazo de su tierra, le consultamos ¿qué es lo más colombiano que tiene Fonseca? A lo que el artista contestó: “el corazón”. Insistimos: ¿Cómo es el corazón del colombiano? “Como el de todos los latinoamericanos, siempre está preparado. El colombiano sabe que la situación puede ser difícil, pero hay que ponerle buena cara.Venimos de un país con una historia muy fuerte,pero la vida también nos ha enseñado a enfrentar todo con optimismo”.

El cantante de Te mando flores viene siempre a Panamá, por lo menos una vez al año. Llena los recintos donde se presenta. “Te digo, no porque esté hablando contigo ni solo porque a través tuyo me dirija a la gente de Panamá, sino porque, desde la primera vez que fui al país sentí una conexión orgánica, real, genuina... como una energía que valora el compromiso que tengo con la música. Y siento que mis letras logran llegar a muchos corazones allá”.

Agrega que para él “siempre es muy importante ir a Panamá a presentar mi música. Cuando hago un lanzamiento me gusta hacer una visita de medios, presentar el álbum... pero, sobre todo, lo más importante es representarlo en vivo. Y si antes teníamos una conexión de corazón,creo que después de esta colaboración con el maestro Rubén Blades, esa conexión se volvió aún más profunda. Es un país al que quiero mucho y al que le debo mucho”.

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