El módulo Blue Ghost, de la firma estadounidense Firefly Aerospace, envió impresionantes imágenes de la Tierra mientras orbita el planeta azul y previo...
- 12/12/2012 01:00
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PANAMÁ. Después de cortarse el cabello y perder aproximadamente 26 libras para interpretar a Fantine en la adaptación al cine de Les Miserables (2012) por el director Tom Hooper, la actriz Anne Hathaway ha vuelto a ser el cisne. Ni muestra de la mujer con cabeza rapada y silueta desgarbada que se dejó ver en junio.
Como para sacarse la espina de aquel miserable aspecto que le exigió su papel y que tuvo su secuela en su vida personal, ahora, llegado el momento de la gira promocional de la película, la estadounidense compuso un ajuar que ha sido imparable en la alfombra roja. Los ‘flashes’ van directo a ella, por más que posen a su lado, Amanda Seyfried y Samantha Barks, también actrices y hermosas mujeres.
El lunes 10 de diciembre al teatro Ziegfeld de Nueva York apareció con un look gótico, gracias a un traje de Tom Ford con globo en la espalda y abertura en el lateral derecho, que dejó ver unas sandalias con tacón de aguja y un andamio de tiras que suben hasta arriba de la rodilla.
La semana anterior, el 5 de diciembre, para el estreno de la cinta en Odeon Cinema, en Londres, Reino Unido, se atavió con un vestido blanco de Givenchy Haute Couture.
En Les Miserables, la actriz comparte protagonismo con Hugh Jackman. Este año, en Panamá, la vimos interpretando a Gatubela en The Dark Knight Rises de Christopher Nolan.
La prensa de la moda comenzó a seguir los pasos de Hathaway luego de su papel en The Devil Wears Prada (2006).