Roban pintura de Van Gogh a 167 años de su natalicio

Un día como hoy en 1853, en Países Bajos nació el que sería uno de los pintores más importantes y reconocidos del mundo —aunque solo se diera este hecho luego de su muerte—. Pionero del postimpresionismo, inició sus caminos en el arte desde muy temprana edad. Autodidacta e incomprendido, Van Gogh pintó más de 900 cuadros e hizo más de 1600 dibujos.

Su natalicio coincide con la noticia del robo de una de las pinturas del artista en el Museo Singer Laren de Ámsterdam, actualmente cerrado debido a la pandemia del nuevo coronavirus (COVID-19).  Se trataría del ‘Jardín de Primavera’, una obra realizada en 1884 y que fue sustraída aprovechando que la exhibición estaba suspendida para el público.

El director del museo, Evert van Os, aseguró al diario La Vanguardia, que los dueños del museo estaban “enojados, conmocionados y tristes” por la sustracción de la obra entre la noche del domingo a la mañana de este lunes.

“Estamos impactados por la noticia. Dado que está abierta una investigación policial, declinamos realizar más declaraciones”, asegura el medio español.

Esta noticia no demerita la relevancia de Van Gogh en la actualidad, y nos hace recordar con aún mayor respeto el legado y la vida de este pionero de la pintura moderna. Desde joven, atraído al dibujo se dedicó a aprender y a trabajar en una galería de arte La Haya, una sociedad artística fundada por su tío en París. Su relación íntima con su hermano Theo llegó a ser un factor determinante de su vida y su dirección, como se ha investigado en sus cartas, donde se escribían constantemente acerca de sus problemas, pasiones y aficiones en diversos ámbitos.

El pintor holandés se despidió de la galería en 1876 para regresar a Holanda, y en Ámsterdam se dedicó por un tiempo a estudiar teología, dado que entonces tenía ilusiones de seguir con la vocación de pastor protestante como su padre, pero luego suspendió sus estudios. Luego en 1878 fue de misionero a un pueblo en Bélgica, donde realizó dibujos de los mineros.

En el amor, Van Gogh no había tenido progresos tras sufrir varios desamores. Estuvo con su prima Kate para luego enamorarse de una prostituta llamada Sien, con la vivió y acogió a sus dos hijos hasta que, por influencia de Theo, terminó su relación con ella y se fue a vivir a Nuenen en 1884. Un año después saldría a la luz su primer cuadro importante: Los comedores de patatas.

Al encontrarse con su hermano en Francia, se rodeó con impresionistas y postimpresionistas como Camille Pissarro, Georges Seurat y Paul Gauguin que lo guiaron en su búsqueda de estilo hasta conseguir un toque más colorido y vivaz, dando su propio toque al postimpresionismo en sus cuadros. Su interés por los colores y la naturaleza lo hizo mudarse a Arles en Provenza, allí desarrolló su técnica de pintura, enfatizando sus sentimientos por los paisajes y su visión de estados de ánimos.

La famosa historia de la pérdida de su lóbulo izquierdo ha tenido algunas versiones, sin embargo, la más reconocida por biógrafos, cartas y autorretratos relatan un conflicto entre Van Gogh y Paul Gauguin, donde a través de amenazas, Van Gogh sacó una navaja de afeitar y atacó a Gauguin, para luego, arrepentido, decidió cortarse el lóbulo y enviarlo a su amigo, el cual sin conmoverse, retiró toda relación entre ambos y lo condenó de loco y peligroso.

En plano artístico, el pintor llevó a cabo doscientos cuadros en su casa de Arlés, uno de ellos: La habitación de Arlés (1889), una de sus más famosas obras, seguido de Los girasoles (1888, National Gallery, Londres), que representaba la acogida de su casa y se utilizaría como decoración de la misma, como se explican los investigadores Ruiza, M., Fernández, T. y Tamaro, E., en su trabajo Biografía de Vincent Van Gogh.

En sus últimos años, el holandés cayó en una crisis mental aumentada por la obra de Gauguin, Vincent Van Gogh pintando girasoles, donde creyó ver reflejada su propia locura y se sumió en un torbellino de desesperación que lo llevaría a ser internado años despúes. En esta etapa de desconcierto, pintó uno de sus mejores cuadros: Autorretrato (1890, Museo de Orsay, París).

Un artista turbado, incomprendido y distante de su propio ser era Van Gogh en sus últimos años, pintando cada vez más cuadros con colores vivos, pero interrumpidos por oscuros trazos que representaban su ansiedad constante. Van Gogh pintó su última obra antes de su fallecimiento, Trigal con cuervos (1890, Museo Van Gogh), un cuadro con colores oscuros y tensos donde una bandada de cuervos pasan por encima de un trigal, atravesando un cortado camino bajo un cielo oscuro y dispar, el cual ha disparado muchas interpretaciones por críticos y expertos. 

Un año después de su muerte causada por una arma de fuego —que no se termina de comprobar si fue suicidio u homicidio accidental— el 29 de julio de 1890, en Auvers-sur-Oise, Francia, Van Gogh quedó plasmado como uno de los más grandes artistas de pintura moderna, e influyó grandemente en el arte del siglo XX, especialmente entre los expresionistas alemanes y los fauvistas como Matisse, Derain, Vlaminck y Kees Van Dongen, como indica la investigación de los historiadores Ruiza, M., Fernández, T. y Tamaro, E.