Real Madrid comienza un ciclo que confía lidere Mbappé

  • 14/08/2024 00:00
Frente al Atalanta se encuentran en la final de la Supercopa, en un duelo de técnicos italianos, con planteamientos tácticos y recursos contrastados, que aumentan el atractivo

El Real Madrid, esa multinacional del fútbol que es el club español, pone a andar hoy su proyecto 2024-25 en Varsovia, Polonia, con la disputa de la Supercopa de Europa ante el Atalanta. Será un partido en el que buscará atrapar para su rico historial un título más, pero también utilizarlo de plataforma para el estreno de Kylian Mbappé, su nueva estrella, que han llevado al club con la intención de marcar con su nombre una época más de éxito.

La sed de protagonismo es insaciable en el club ibérico: no le ha bastado con haber ganado la última Champions y la liga española, poseer además una plantilla con la que cualquier otro club sentiría que tiene el potencial suficiente para repetir los logros y sumar otros; para estremecer la temporada que inicia, agregaron de colofón la incorporación de la promesa brasileña Endrick. Y todavía, antes del cierre del mercado de fichajes, podrían incorporar otros jugadores destacados aunque sin tanta resonancia como los dos mencionados.

En Europa no se emiten todavía señales (aparte del Manchester City), de otro club inglés, un alemán o francés que les pueda provocar pronto sombra; a lo interno, en la Liga española que arranca este fin de semana, enfrentándose al Mallorca, en la primera fecha del calendario, el Barcelona, su rival más enconado y tradicional, sigue en etapa de reconstrucción.

Todo le cuadra al equipo merengue, al punto que si tuviese que afrontar una emergencia económica extrema se ha develado que el Fondo de Inversión Público de Arabia ha expresado un interés “millonario” en hacerse con los servicios de Vinicius, el jugador más desequilibrante actualmente del fútbol, con contrato hasta 2027.

El propósito es darle a la Saudi Pro League una imagen que le agite internacionalmente, para propulsar desde ahora el mundial 2034 que deberá disputarse en Arabia Saudita. Real Madrid ha expresado públicamente: no. Algunos medios de comunicación afirman que a lo interno no está dicho con letras mayúsculas, que no dejarían de mirar si sobre la mesa ponen una cifra concreta.

Florentino, el otro crack

Son los títulos y los jugadores deslumbrantes los que han hecho del Real Madrid un buque insignia del balompié profesional español, cuya camiseta es posible encontrar en cualquier rincón del mundo, luciéndola como indumentaria diaria en adultos, adolescentes o niños. El liderazgo detrás de toda la gestión, desde el 2000, es su presidente Florentino Pérez.

El empresario español ha marcado la impronta del club con dos periodos al mando en los cuales ha provocado cambios con movimientos internos y un posicionamiento en el exterior impensado; su aporte lo atribuyen a sus cualidades empresariales y estudios. Algunos le conceden la perspectiva visionaria al conocimiento del competitivo comportamiento empresarial del deporte profesional de los Estados Unidos, observado cuando estuvo allí durante su época de estudiante, acogido en San Francisco por la familia Spencer.

En su primera etapa en el poder provocó una sacudida extrema al Barcelona, al arrebatarles su principal figura en ese momento, el portugués Luis Figo; subió las tensiones entre ambos equipos y a sus seguidores les removió la rivalidad contra los azulgranas. Luego inauguraría lo que se ha llamado la Era Galáctica trayendo a Madrid a Beckham, Ronaldo y Zidane, principalmente, con mucha pegada mediática y con algunos títulos, siéndole esquiva la Champions League. Renunció en 2006.

El segundo periodo que abarca desde 2009 hasta hoy, tuvo como bandera la contratación de Cristiano Ronaldo y de Kaká, a los que agregaría a Benzema y Xavi Alonso. Cristiano Ronaldo marcaría época teniendo incluso al frente al Barcelona de Messi. El Real Madrid con Florentino no se ha detenido en acumular títulos, incorporar a los mejores jugadores, renovar su infraestructura e implementar cambios en su administración. Parece inconcebible concebir hoy al Real Madrid sin Florentino Pérez al mando.

Atalanta, ¿presa fácil?

Los italianos sorprendieron en mayo pasado cuando se impusieron 3-0, por la Europa League, sobre el súper favorito Bayer Leverkusen dirigido por Xabi Alonso. Los alemanes llegaban con el récord de 51 partidos sin perder y el título de la Bundesliga bajo el brazo. Un equipo ordenado, paciente para contraatacar y rocoso para defender. Le pasaron por encima a los alemanes. Forma parte del anecdotario de la pasada temporada esta célebre frase con la que el entrenador Pep Guardiola definió al equipo dirigido por Gian Piero Gasperine. Dijo Guardiola para graficar lo complicado que es enfrentarlos: “Jugar contra Atalanta es como ir al dentista”.

Bajo ese concepto se esperaría un rival complicado para el Madrid, sin embargo queda la incógnita de si el Atalanta será el que mencionaba Guardiola o ha perdido capacidad de juego debido a que en estos últimos dos meses han tenido problemas para mantener intacta la cohesión de su plantel.

La principal figura sobre la que giró el equipo, el holandés Teun Koopmeiners, está en trámites para su vinculación a la Juventus, no ha querido entrenar con el club y no jugará hoy. A ello se le agrega la ausencia de Giorgio Scalvini y de su goleador en la Europa League, Gianluca Scamacca, ambos fuera por lesión. Tampoco contarán con Nicoló Zaniolo su reciente incorporación, ni el defensa Rafael Toloi, también aquejando dolencias para jugar.

Gasperine, viejo zorro en el fútbol, ha llevado al Atalanta cuatro veces a la Champions League; es un entrenador metódico, innovador y con vasta experiencia, distinguido en dos ocasiones como el Entrenador del Año en la Serie A italiana. Conoce muy bien a su paisano Carlo Ancelotti, el entrenador del Madrid, con quien compartió cuando Ancelotti dirigía la Juventus y él era entrenador en las categorías inferiores. “Para mí será muy especial jugar contra él esta final, teniendo en cuenta que hace 30 años yo entrenaba al equipo juvenil y él al primer equipo. Eso fue hace muchos años, pero será maravilloso volver a encontrarnos”, comentó en una entrevista con la UEFA.

Sobre el partido de esta tarde (2:00 p.m.) señaló: “Jugaremos contra el club más laureado del mundo...Jugar una final así, por este trofeo, habría sido impensable hace poco. Hay un enorme sentimiento de orgullo. También es una sensación de querer estar ahí”. Resaltando: “Es un momento realmente inspirador para todo Bérgamo, para todos los aficionados. No cabe duda de que es un punto culminante, quizá el más alto de la historia de la Atalanta”.

Queda claro que Gasperini apelará a un alto estado de motivación de sus jugadores por el trofeo que se disputa, por los beneficios económicos que supone el ganar y sobre todo por ser ésta ante el Real Madrid; repetir la historia del pequeño que con una honda derriba al gigante invencible, mantiene los ánimos al alza.

El Real Madrid suelta hoy el carrete de su caña de pescar para esta temporada en el estadio PGE Narodowy, proyectando como su gran pescador a Kylian Mbappé; veremos si comienza atrapando el delicioso bocado que es la Supercopa o el Atalanta les saluda dejándoles en veda en su primera faena a mar abierto.

Lo Nuevo