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- 08/08/2011 02:00
- 08/08/2011 02:00
PANAMÁ. Recientemente he tenido comentarios de algunos lectores acerca de los temas de actualidad y de los análisis que hacemos del petróleo y derivados.
Los eventos geopolíticos, ambientales, naturales y sociales que afectan el crudo y todo lo que se produce de este son los que hasta ahora nos han ocupado.
No obstante también nos han solicitado referirnos a temas que afectan e inciden en la vida diaria del consumidor final.
De tal manera, intentaré resumir y hacer algunas recomendaciones acerca de los combustibles y algunos consejos del uso apropiado en sus autos.
Espero con suerte también compartir algunos otros datos interesantes. En resumen, acercarnos al lector y su cotidiano vivir.
TIPOS DE COMBUSTIBLES
Los tipos de combustibles pueden confundir a muchos conductores.
Las gasolinas y el diesel son combustibles y son totalmente diferentes. Igualmente los son el kerosene y el bunker.
En el sector industrial se usa incluso el gas licuado de petróleo y predomina el diesel y el bunker.
En el campo marino es algo complejo, pero de esos no nos ocuparemos hoy.
Iniciemos con las gasolinas. Hay dos tipos que predominan en Panamá: las gasolinas de 91 octanos y la de 95 octanos. Sí son diferentes, NO son iguales como mucha gente podría pensar.
La diferencia es el número de octano, lo cual representa la capacidad de ignición del combustible y de allí que no produzca ruidos productos de ignición prematura en la cámara de combustión, es decir, adentro del motor. En inglés es su capacidad de ‘anti knocking’.
El tipo de combustible a usar en su auto, depende del diseño del motor. Normalmente hay un límite mínimo de octanaje.
El usar combustible de 95 octanos no necesariamente le produce algún beneficio si su fabricante ha diseñado su auto para usar combustibles de menor número de octanos.
Esto se torna importante en este momento que existe una diferencia en el precio de ambos combustibles.
Un auto de diesel no puede usar gasolinas (en ninguna proporción) ni viceversa. Esos mitos de que hacer una mezcla para lubricar o para mejorar cualidades, es absurdo.
Tampoco hará que el carro se convierta en un Fórmula 1 (un combustible con mayor octanaje).
Hace muchos años escuchaba gente que mezclaba combustible de aviación (para motores de pistones no para turbinas) con la esperanza de tal hazaña. Nada cierto, seguramente lo que les produjo fue daños al mismo motor producto de una combustión para la cual no está calibrado su auto.
Tampoco debe mezclarse ningún tipo de lubricante con el combustible del auto. Ni grasa, ni aserrín, ni pimienta, ni nada similar en las transmisiones.
Si presenta problemas, reparar el equipo, siempre y cuando se sea cuidadoso con el mantenimiento preventivo de su auto no debiese tener mayores problemas.
MITOS
El tema de los lubricantes es un tema muy interesante. Hay muchos mitos acerca del mismo.
El de mayor popularidad es que a mayor viscosidad es mejor el mismo para un auto; todo lo contrario, una mayor viscosidad le genera un mayor trabajo a la bomba de aceite. Al ser mas espeso, se demora en circular por el motor al arrancar en frío.
Los aceites multigrados (10W/30, 20W/50, 15W/40) son los que se usan en los motores modernos. Estos números representan solo la viscosidad del lubricante, contrario a de una sola viscosidad o mono-grados; 30, 40 y 50 de antaño. Hoy día, no se usa el aceite mono – grado en motores de autos.
La calidad del lubricante la determina su especificación aprobada por el Instituto Americano de Petróleo o por sus siglas en inglés A.P.I.
En el caso de las gasolinas, una especificación API SH es mas reciente que una SA; dado que avanzan de SA, SB, SC, SD y así sucesivamente.
Lo mismo aplica para los lubricantes de motores diesel; CA, CB, CD hasta CF, CF -4, etc.
Al apreciado lector, le reiteramos, revisar el manual de su auto y usar el lubricante recomendado por el fabricante.
Le hago la observación de que el aceite de motor adecuado al igual que el cambio de todos los fluidos del auto de acuerdo al programa de mantenimiento recomendado por el fabricante es lo que debe prevalecer.
Las gasolinas actuales no tienen ni plomo ni tampoco tienen MTBE (metyl terbutyl ether) para elevar el octanaje. Ambos componentes fueron desechados.
Hoy día fueron reemplazados por otros oxigenantes menos riesgosos a la salud humana.
He escuchado muchas veces decir que ‘la gasolina de tal o cual estación o marca me da mayor rendimiento’. Desde mi punto de vista, es poco probable.
La composición química de las gasolinas es la misma, adicionalmente el 90% de la que se importa a Panamá proviene del mismo lugar.
Los chances son de que en esa estación, tal vez, si le estén despachando galón completo y por eso le rinde mayor cantidad de kilómetros.
El etanol se mezcla con las gasolinas en muchos países. El tema es más complejo de lo que parece, pero me limitaré a enunciar, que ningún auto con motor convencional resiste mezclas superiores al 10% de alcohol. Si tiene dudas, consulte con su fabricante.
Los autos ‘Flex Fuel’ son motores que si lo permiten y los ingenieros que han diseñado dichos vehículos contemplaron mezclas altas de alcohol.
En el caso del diesel, la diferencia es principalmente en el contenido de azufre. La volatilidad del mismo la determina el número de cetano.
Este combustible, gasóleo, pareciera un aceite, tiene buena capacidad de lubricidad y su ignición es por compresión. De allí que los motores diesel no usen bujías.
CLASES DE DIESEL
Existen varias clases de combustible diesel.
Procedo a mencionar tres; alto azufre, bajo azufre y ultra bajo azufre.
En Panamá solo existen las dos primeras, en concentraciones de mil partes y quinientas partes por millón de azufre.
A menor cantidad de azufre decrece su nivel de contaminación. No obstante, los fabricantes modernos se inclinan a menor concentración de azufre.
De hecho, en Europa la norma es estricta en comparación con la de los Estados Unidos.
Espero que lo arriba descrito pueda dar un breve vistazo o iniciación a un producto que diariamente afecta nuestras vidas.
Como leen, es un tema para buen rato.