El impacto va más allá de la venta final. Incluye la compra de telas, hilos perlas y otros insumos, creando una cadena de valor que dinamiza la economía...
- 03/11/2025 00:00
Expertos en la rama científica lanzaron un llamado urgente a modernizar el sector agropecuario panameño, instando a una transición desde modelos convencionales hacia un sistema de producción más colaborativo, inclusivo y fundamentado en el conocimiento científico.
La Secretaría Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (Senacyt) y el Instituto de Innovación Agropecuaria de Panamá (Idiap) presentaron el “Diagnóstico del Sistema de Conocimiento e Innovación Agropecuaria de Panamá”, un estudio crucial que contó con el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Centro Internacional de Agricultura Tropical (CIAT).
El diagnóstico busca impulsar una profunda reflexión nacional sobre la necesidad de modernizar la estructura que genera y comparte conocimientos en el agro. El objetivo es fortalecer la capacidad del país para enfrentar retos ineludibles como: el cambio climático y la necesidad de resiliencia, la pérdida de biodiversidad, los desafíos de la inseguridad alimentaria y las brechas tecnológicas que limitan a los productores.
Según el estudio, el sistema panameño actual mantiene un enfoque convencional y fragmentado, ya que el conocimiento fluye de manera lineal: investigadores producen, extensionistas transmiten y productores reciben.
Los expertos señalan que este modelo “difusionista” ha mostrado ser limitado para atender la diversidad de los productores, la complejidad de los territorios y los desafíos contemporáneos.
Para superar estas deficiencias, el diagnóstico propone adoptar el enfoque del Sistema de Conocimiento e Innovación Agropecuaria (AKIS, por sus siglas en inglés), que es un marco propuesto para pasar de un sistema agropecuario fragmentado, con gobernanza débil, a uno más colaborativo, integrado e inclusivo.
AKIS tiene como objetivo promover que todos contribuyan a generar y compartir conocimientos: productores, científicos, técnicos, educadores y formuladores de políticas.
Se enfoca en el reconocimiento de los saberes locales, la cocreación de soluciones adaptadas al mundo real y la innovación basada en la demanda de los usuarios finales (los productores).
El estudio es optimista y revela que Panamá cuenta con el potencial necesario para esta transformación, incluyendo instituciones públicas sólidas, personal técnico capacitado y una gran variedad de actores del sector privado, cooperación internacional y sociedad civil.
La meta final de esta modernización es clara: transformar el sistema agropecuario panameño en uno más dinámico, inclusivo y resiliente, capaz de ofrecer respuestas efectivas a las necesidades de los productores, especialmente a aquellos en condiciones de mayor vulnerabilidad social, económica y climática.