Al menos 12 personas murieron y centenares de miles se encuentran afectadas a causa del fuerte temporal causado por un frente monzónico y el tifón Gaemi,...
- 18/02/2015 01:01
- 18/02/2015 01:01
Un juez del estado de Texas (sur) acató en la madrugada del martes el pedido de 26 gobernadores republicanos y bloqueó la aplicación de decretos migratorios anunciados en noviembre por el presidente Barack Obama, hasta que una corte se expida sobre su constitucionalidad.
La decisión del juez Andrew Hanen, del tribunal federal de Brownsville, detiene en seco un proceso puesto en marcha por el gobierno para beneficiar a un contingente estimado de entre cuatro y cinco millones de inmigrantes en situación irregular y evitar su deportación.
Los estados y jueces que patrocinaron la demanda ante el juez Hanen consideran que Obama se excedió en sus atribuciones presidenciales y que al ordenar acciones ejecutivas sobre la cuestión migratoria violó la Constitución. Los estados alegan que las acciones anunciadas por Obama provocarán ‘daños dramáticos e irreparables’.
En un extenso documento de 123 páginas Hanen tuvo el cuidado de no considerar ilegales las acciones de Obama, pero cuestionó el derecho del presidente de adoptarlas.
El juez destacó en su informe que las medidas anunciadas por Obama se refieren a un tema que el Congreso analiza. ‘No puedo apoyar un programa que no solamente ignora el dictado del Congreso, sino que activamente se propone frustrarlo’, apuntó el magistrado.
El Servicio de Inmigración y Ciudadanía (USCIS, dependiente del Departamento de Seguridad Interna) tenía previsto comenzar a recibir y procesar a partir de hoy las demandas de regularización de inmigrantes, tanto de personas que ingresaron como menores de edad (DACA) como de los padres (DAPA) de jóvenes que ya se beneficiaron de un programa similar en 2012.
Sin embargo, el Secretario de Seguridad, Jeh Johnson, anunció el martes que los órganos responsables no aceptarán los requerimientos ‘como estaba originalmente programado’.
‘Estoy en firme desacuerdo con la decisión del Juez Hanen’, expresó Johnson en una nota oficial, donde también adelantó que ‘el Departamento de Justicia apelará este bloqueo temporario. Por ahora, debemos reconocerlo y obedecerlo’.
‘QUE NO CUNDA EL PÁNICO’
Mientras, el fiscal general de Texas, Ken Paxton, afirmó que la decisión del juez constituye ‘una victoria para el reinado de la ley en Estados Unidos y un primer paso crucial para cercar el desenfreno del presidente Obama’.
El republicano Greg Abbott, gobernador de Texas y promotor de la acción legal, dijo que la decisión de Hanen ‘correctamente detuvo el exceso del presidente’.
Del lado opuesto, Melissa Crow, asesora legal del Consejo Estadounidense de Inmigración, destacó en una conferencia de prensa que la decisión del juez Henan considera que el gobierno incumplió con una exigencia técnica. ‘Estamos convencidos que las medidas anunciadas por el presidente Obama están perfectamente dentro de sus atribuciones legales’, manifestó.
Por su parte, Marielena Hincapié, directora del Centro Legal sobre Inmigración, señaló que el juez Hanen buscó ‘crear confusión y generar miedo en la comunidad’. ‘Estamos seguros que cuando el Departamento de Justicia presente su apelación, el proceso será adelante’, afirmó Hincapié.
Para la asesora legal Debbie Smith, el mensaje a las personas (que planeaban solicitar regularización) es: ‘no entren en pánico, sigan preparándose, sigan juntando documentos; porque esto es un bache en el camino, no es el fin del juego y la justicia se impondrá’.
Por último, el Gobierno mexicano lamentó la decisión del juez y aseguró que redoblará sus esfuerzos para brindar información y asistencia a sus ciudadanos en EEUU al tiempo que les alertó sobre ‘posibles engaños y fraudes migratorios’.
CONGRESO INMÓVIL
Obama anunció en noviembre un paquete de medidas para sacar de la irregularidad a millones de inmigrantes, por considerar que el Congreso ha desmostrado ser incapaz de aprobar una reforma migratoria completa.
El Senado llegó a aprobar en 2013 un ambicioso proyecto de ley de reforma del sistema legal sobre migraciones, que luego quedó empantanado en la Cámara de Representantes (diputados).
Con la oposición republicana ahora en control de las dos cámaras del Congreso el proyecto es considerado ‘letra muerta’.
La situación llegó a tal punto que el Departamento de Seguridad Interna (DHS, órgano responsable de aplicar las medidas de alivio migratorio) tiene presupuesto aprobado apenas hasta el 27 de febrero.
Un proyecto de ley impulsado por los republicanos establece un presupuesto para ese Departamento pero elimina de un plumazo los recursos para medidas migratorias. Hasta ahora, los Demócratas han bloqueado la votación de esa ley.