La iniciativa se presenta como una estrategia de alto valor económico y turístico, capaz de posicionarse como producto insignia de la oferta cultural panameña....
Eln niega vínculos con el narcotráfico tras ataque de Estados Unidos en aguas del Caribe y el Pacífico
- 22/10/2025 16:18
El Ejército de Liberación Nacional (Eln) negó de forma categórica tener relación alguna con actividades de narcotráfico, luego de que el Departamento de Guerra de Estados Unidos asegurara haber abatido a tres presuntos narcotraficantes vinculados a esa organización en un ataque realizado la semana pasada en el mar Caribe.
En un comunicado, el comando central del Eln declaró que su estructura “no tiene ni tendrá embarcaciones relacionadas con el tráfico de drogas, ni en el Caribe ni en ningún otro mar”, y que tales prácticas están “prohibidas para sus militantes”.
La guerrilla afirmó además que, por mantener una “posición crítica y ética”, ha sido objeto de operaciones y campañas de desprestigio impulsadas por agencias estadounidenses como la DEA y la CIA, pero aseguró que “todos esos intentos por vincular al Eln con el narcotráfico han fracasado”.
El incidente ocurre en medio de una crisis diplomática creciente entre Estados Unidos y Colombia, luego de que Washington declarara formalmente un “conflicto armado no internacional contra el narcotráfico” e iniciara una ofensiva militar en el Caribe.Desde septiembre, el Pentágono ha llevado a cabo al menos siete ataques a supuestas narcolanchas cerca de las costas venezolanas, bajo la justificación de frenar el tráfico de drogas hacia Norteamérica.
El secretario del Departamento de Guerra, Pete Hegseth, confirmó que en uno de esos operativos murieron tres presuntos “narcoterroristas” y vinculó la embarcación atacada con el Eln.
Sin embargo, el presidente colombiano, Gustavo Petro, desmintió esa versión y aseguró que la lancha pertenecía a una familia local de pescadores.
“Esa embarcación no tenía ninguna relación con el Eln. Fue un ataque contra civiles”, afirmó el mandatario, quien solicitó a la Fiscalía colombiana una investigación inmediata por la muerte del pescador Alejandro Carranza.
Petro calificó la acción de Washington como una violación a la soberanía nacional y recordó que su gobierno mantiene suspendidos los diálogos de paz con el Eln desde hace un año, aunque expresó su voluntad de reabrir las negociaciones para “probar la paz”.
Mientras tanto, Estados Unidos extendió sus operaciones militares al océano Pacífico, ejecutando un nuevo ataque contra una embarcación que, según el Pentágono, estaba vinculada con el narcotráfico internacional.
El propio Hegseth anunció en la red X que, por orden del presidente Donald Trump, el Departamento de Guerra realizó “un ataque cinético letal” en aguas internacionales del Pacífico oriental.En el mensaje, el funcionario precisó que dos supuestos narcotraficantes murieron y difundió un video donde se observa el impacto de un proyectil sobre una lancha que estalla en llamas.
Medios como The New York Times y CBS News ubicaron el bombardeo frente a las costas de Colombia, en un contexto de alta tensión con Bogotá, luego de que Trump anunciara la suspensión de la ayuda financiera estadounidense a Colombia por su supuesta “inacción en la lucha contra el narcotráfico”.
El secretario Hegseth defendió las operaciones afirmando que Estados Unidos “no dará refugio ni perdón” a los cárteles de la droga.
“Los narcoterroristas que intenten llevar veneno a nuestras costas no encontrarán refugio en ningún lugar del hemisferio”, aseguró.
Este sería el octavo ataque confirmado desde el inicio de la campaña militar estadounidense, y el primero registrado en el Pacífico, en el marco de una operación que ya ha destruido siete embarcaciones en el Caribe.
La creciente presencia naval y aérea estadounidense cerca de las costas de Colombia y Venezuela ha encendido las alarmas en ambos gobiernos. Tanto Gustavo Petro como Nicolás Maduro han denunciado que estas acciones representan una violación al derecho internacional y una agresión a la soberanía latinoamericana.
Analistas advierten que la situación podría derivar en un deterioro de las relaciones bilaterales entre Washington y Bogotá, especialmente tras las duras declaraciones cruzadas entre Trump y Petro. El mandatario colombiano calificó al presidente estadounidense de “grosero e ignorante con Colombia”, en respuesta a sus recientes acusaciones.