Contra todo pronóstico

La condición de un debate es propicia cuando se entrevén dos o más posiciones antagónicas en torno a un determinado tema. Barack Obama es producto de los debates porque desde el inicio de su carrera hacia la Casa Blanca tuvo que debatir en reiteradas ocasiones a lo interno del Partido Demócrata y luego en la campaña presidencial.

En la República de Panamá parece ocurrir lo contrario. Algunos candidatos se muestran como un excelente producto ante los medios, pero se niegan a comparecer a los debates bajo argumentos de poca credibilidad para la población. Muchos entendidos aseguran que se trata de una estrategia política igual a de la ex presidenta Moscoso que sin participar de los debates se alzó con el triunfo. El resultado fue una decepcionante gestión gubernamental y los panameños no quieren volver a repetir esta historia. Balbina Herrera está demostrando un discurso de fondo sostenible, potable, y coherente. El Transmóvil y las discrepancias entre el mandatario y Navarro es un tema al que respondió con altura y expresó claramente que por encima de las diferencias personales de sus copartidarios está la consecución de un proyecto de Estado que promueve paliativos para los problemas del alto costo de la canasta básica, el transporte, y la seguridad.

Con la sinceridad de una mujer a la que nada le ha sido regalado en la vida, habló sin cortapisas de lo relacionado a su declaración de bienes, el caso Portugal, su relación de trabajo con Noriega —al que muchos empresarios niegan hoy después de lucrar con él—, así como una explicación sobre su plan de seguridad de mano dura con justicia que se circunscribe a: mayor estímulo para los uniformados, menos impunidad, mayor autoridad a los padres de familia y profilaxis en los barrios para disminuir la delincuencia. Además, habló de la solicitud de visa para los ciudadanos colombianos y mexicanos, su posición de no acceder a una apertura del Darién y su guerra contra el narcotráfico.

Explicó las bases de su plan educativo sobre el contenido de una educación con excelencia y valores, la importancia de unificar al gobierno con la empresa privada para el mantenimiento de las infraestructuras, así como la autonomía en la administración educativa, entre otros aspectos. La crisis económica será enfrentada con disciplina fiscal a través de un modelo de economía diversificada y bajo una reorientación de la inversión local.

En resumen, Balbina Herrera no es una candidata sujeta a un guión de un jefe de campaña; mucho menos un producto mediático. Representa una generación de personas que tuvieron la oportunidad de crecer académicamente y su gestión pública es testimonio de esta premisa. Finalmente traemos a colación una frase del francés Victor Hugo para Balbina, “El futuro tiene muchos nombres. Para los débiles es lo inalcanzable. Para los temerosos lo desconocido. Para los valientes es la oportunidad”, su valentía es la mejor carta de presentación.

- El autor es comunicador social. amedarosemena@gmail.com