• 20/04/2010 02:00

Necropsia a la Caja de Seguro Social (II)

Para solucionar de manera radical el problema económico y operacional de la CSS, debemos realizar la siguiente transformación integral.

Para solucionar de manera radical el problema económico y operacional de la CSS, debemos realizar la siguiente transformación integral.

Primero: Eliminación absoluta de la injerencia del gobierno en la institución. La creación de una “Entidad manejada por sus dueños” (asegurados, jubilados, pensionados y patronos”) y sus servicios médicos, hospitalarios, de pensión y jubilación sólo sea para quienes pagan sus cuotas mensuales.

Segundo: Que el gobierno inicie la reestructuración del sistema de seguridad social, mediante la modernización de sus centros de salud, para atender la población no asegurada.

Tercero: La construcción de hospitales dirigidos y operados por el Estado para atender a la población no asegurada por la CSS.

Cuarto: La eliminación total y gradual de los servicios a los “beneficiarios”, durante un período de cuatro años y el Estado asumir su responsabilidad brindando la salud y los beneficios colaterales a esa población no asegurada.

Quinto: La nueva entidad mantendrá, dentro de la Ley Orgánica, la asistencia a los asegurados que tengan hijos con discapacidad física para atenderlos en todo lo relacionado con la salud de ellos, en sus policlínicas, hospitales y demás prestaciones.

Estos y otros puntos deben ser considerados para la creación de la nueva entidad que reemplazaría a la Caja de Seguro Social, lo que exige una reingeniería bien planificada para su debido control y funcionamiento.

La Caja de Seguro Social, tiene sus años contados y todos los esfuerzos que se realicen para su salvación serán inútiles porque no hay institución, con recursos limitados, como la CSS que pueda asumir la atención, de más tres millones de panameños. El gobierno debe responsabilizarse de la salud del pueblo como estaba establecido antes de 1972.

La Caja de Seguro Social debe ser exclusiva para los que cotizan y pagan por sus servicios, acumulando una reserva para sus futuras jubilaciones y pensiones, considerando la posibilidad de que sólo exista: “jubilación” con derechos claramente establecidos, incluyendo aumentos posteriores de acuerdo con la situación económica del país.

Para salvar a la Caja de Seguro Social, hace falta la buena voluntad de todos los que formamos parte de la institución y la aceptación gubernamental de su responsabilidad de la salud del pueblo.

Esta transformación de la entidad debe planificarse para ir descongestionando los servicios y paralelamente el gobierno asumiendo su responsabilidad. De lo contrario antes que termine el actual gobierno no tendremos Caja de Seguro Social.

*El autor es Historiógrafo escritoramador@gmail.com

Lo Nuevo
comments powered by Disqus