• 30/06/2014 02:00

Control de precios y equilibrio de mercado (I)

El control de precios, es una medida antigua que se ‘remonta al Antiguo Testamento

Con acierto, el presidente electo Ing. Juan Carlos Varela, ha dicho que desde el día uno de inicio de su mandato presidencial, planteará al país CONTROL DE PRECIOS de emergencia para 22 artículos que componen la canasta básica familiar, con el propósito justo de que los consumidores lleven más del producto a sus casas, al tiempo que logran ahorros sustanciales.

Desde mi perspectiva como economista, es posible el restablecimiento de los controles de precios como política económica, medida que existía y siempre ha existido en los Estados Democráticos que procuran el bienestar general. No obstante, no es cierto que la medida pudiera generar escasez o desabastecimientos. Todo lo contrario, la medida es viable como una fórmula estabilizadora del mercado, cuando se busca el equilibrio entre productores y consumidores; es aquí, donde radica el gran problema. Los consumidores gastan más en alimentos, que en vestidos. El costo promedio de alimentar a cinco integrantes de una familia está por el orden de B/375.00 mensuales, sin incluir los costos de servicios básicos como luz, agua y transporte, sin dejar de mencionar los otros no menos importantes. Si la relación oferta y demanda se diera de manera directa, tanto los oferentes como los demandantes recibirían precios justos por cantidades razonables para ambos, pero cuando entra el intermediario el escenario del mercado queda distorsionado, generando pagos bajos a productores y costos altos para consumidores.

Si el Estado, impulsara una cadena sólida de distribución de la producción, perdería fuerza el intermediario y por consiguiente se controlaría de manera efectiva la especulación. De entre las variadas formas de implementar un control de precios, se trata de la fijación de precios máximos o precios mínimos, tendientes a estabilizar los mercados mediante la norma del equilibrio.

El control de precios, es una medida antigua que se ‘remonta al Antiguo Testamento. En el año 301, el emperador romano Diocleciano emitió su ‘Edicto sobre Precios Máximos’, que regulaba prácticamente todo el comercio de bienes y servicios dentro del Imperio romano’. Sigue...

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