Es hora de limpiar

Ya no es uno, sino dos los magistrados que deben designarse para ocupar un espacio en el palacio de Gil Ponce. Y si faltan dos jueces en la máxima casa de justicia no es porque sus periodos culminaran; sino porque han sido partes de procesos judiciales. Alejandro Moncada Luna llegó a un acuerdo que evitó que fuera a un juicio por parte de la Asamblea Nacional; Víctor Benavides abandonó la Corte cuando, parecía, iba a ser parte de un proceso similar. Juan Carlos Varela está en el momento ideal para darle una vuelta de timón al sistema de justicia. Durante muchos años, la Corte Suprema de Justicia ha quedado en entredicho por la imagen de quienes la dirigen. Se les señala de no ser prístinos en sus decisiones ni en sus valores. Pareciera que la costumbre es elevar a la más alta magistratura a personas cuyo historial está empañado. El presidente puede romper con eso. Si quiere, realmente, hacerle un bien al país, debe, entonces, designar a dos personas que además de profesionales destacados, sean seres humanos intachables. Quizás no sea una medida que le garantice votos en el 2019, pero sí lo colocará como un estadista. Presidente: Encontrar abogados honestos en este país no es difícil. Al contrario, es más fácil de lo que parece. Sí que los hay. Y muchos, muchísimos. Solo h ay que buscar pensando en el país y no en cómo influir.