• 06/12/2023 00:00

El palo no está para cucharas

[...] no vale la pena perder una excelente oportunidad para Panamá, renegociemos, pero con argumentos técnicos y con la razón detrás de nosotros

El pueblo de Panamá dijo no a la minería porque se sintió engañado y por fin lo entendió el gobierno y la asamblea de diputados, por eso promulgaron una ley que termina y prohíbe la minería.

¿Qué se debe hacer y cómo proceder de manera inteligente para no agravar más la situación y no seguir paralizando la economía? ¿Cómo podemos manejar los problemas que tenemos?

Arranquemos diciendo que hay que atender asuntos importantes y urgentes.

Tenemos que atender el asunto del endeudamiento de USD$ 45.000 millones que tiene unos niveles nunca vistos y con dificultades para cumplir. Conseguir USD$ 7.000 millones para atender la deuda durante 2024.

Además, el canal de Panamá está enfrentando problemas de cambio climático y los ingresos se han reducido considerablemente aproximadamente USD $ 200 millones este año y se tiene pronóstico reservado por el fenómeno del niño que está iniciando para el 2024.

Si a los puntos anteriores agregamos que vamos a restarle los ingresos de la minería que serían USD$ 375 es otro golpe durísimo para las finanzas del estado que necesita con carácter urgente recursos para cubrir deuda y atender compromisos. Son USD$ 7.500 millones que se van a dejar de recibir, equivale al valor de dos ampliaciones del canal.

La Caja de Seguro Social y los jubilados necesitan que esos ingresos no se pierdan y más bien que crezcan y se incrementen.

Creo que no resolvemos ninguno de los problemas anteriores tomando decisiones reactivas y emotivas como cuando la pareja lo engaña a uno, es un sentimiento terrible y está generalizado entre la población, los diputados nos engañaron para ellos sacar su botín y que el resto se coma un cable en buen panameño.

Aunque pareciera que todo está dicho respecto al contrato de concesión con Minera Panamá,  quiero comentarles que aún quedan cosas por decir, diferentes a las jurídicas y por analizar para tener en cuenta, nunca es tarde ni está mal echar para atrás si es para salvar vidas , no es necesario destruir lo que se ha avanzado, hay que mejorar sobre lo construido y se puede hacer utilizando la tecnología y los conceptos técnico científicos , el palo no está para cucharas y necesitamos que esos ingresos se queden en Panamá para resolver problemas de vieja data de la CSS y de los jubilados.

Si analizamos técnicamente la situación y dejamos a un lado los sentimientos de ira por el engaño , podemos darnos cuenta de que el negocio es bueno para ambas partes y si analizamos la situación financiera de Panamá, podemos concluir que esos dineros se necesitan, si lo miramos objetivamente si Panamá detiene la minería y no explota los recursos que tiene, otro lo hará y ese dinero se irá a otro país, además Panamá con esa medida no va a salvar el planeta, ni va a solucionar el problema del cambio climático como pretenden hacernos creer algunos ambientalistas sin fundamento técnico.

En conclusión no vale la pena perder una excelente oportunidad para Panamá, renegociamos, pero con argumentos técnicos y con la razón detrás de nosotros, sentémonos con cabeza fría y argumentos, estoy seguro de que a los inversionistas no les interesa desde ningún punto de vista seguir esta tragicomedia de mala prensa a nivel mundial, los dueños de la minera son grandes inversionistas y gente bien intencionada que estarían dispuestos a conversar en buenos términos, a los fondos de inversión tampoco les conviene participar en donde hay escándalos de corrupción y malos manejos, tienen compromisos con la ética y la transparencia.

Si miramos técnicamente las cosas y analizamos qué asuntos se pueden mejorar, qué se debe hacer para mejorar la situación, encontramos que hay varios grupos de interés que han protestado con mucha razón porque no los han escuchado y eso es precisamente la raíz del problema, aunado al pésimo manejo de comunicación por parte y parte, ya que estaban convencidos de que nadie se daría cuenta de lo que estaban haciendo; la gente puede ser ignorante, pero no boba, hay que mirar la raíz del asunto, escucharlos y ver qué medidas se deben tomar, mirar qué hay que hacer con las comunidades vecinas, con los raizales, con los trabajadores de la mina y todos los que están involucrados en la cadena.

El negocio es tan bueno que se puede hacer de manera sostenible, que haya mitigación y adaptación al cambio climático, planes de compensación ambiental, se puede hacer de manera  que cumpla toda la normativa internacional de asuntos ambientales y sociales, lo relacionado con principios y compromisos ESG, ODS y responsabilidad corporativa, se puede establecer un régimen de salarios especial para los empleados de la mina en donde el salario mínimo sea superior al del resto del país, se pueden establecer compromisos con el medio ambiente, con las comunidades,  de seguridad social y salud, inversiones en desarrollo comunitario , reporting, informes de doble materialidad en resumen se pueden hacer bien hechas las cosas y de manera técnica y científica en donde todos ganemos y cumplamos con la naturaleza. También se deben involucrar la veeduría internacional como cuando uno está jugando con las cartas destapadas pensando en hacerlas bien, no en hacer trampa y cortar camino. Estamos aún a tiempo. El autor es estratega empresarial y consultor independiente.

Lo Nuevo